Canal de la Red Cántabra de Desarrollo Rural, entidad sin ánimo de lucro que agrupa a los Grupos de Acción Local de Cantabria que gestionan el programa LEADER de Desarrollo Rural.
Ese tejo estaba perfectamente sano en el 2.001,tuvo que pasar algo en su salud para que en tan poco tiempo se resquebrajase de esa forma,las enfermedades que atacan a los tejos no los matan de la noche a la mañana,no entiendo cómo nadie se preocupó al ver las primeras señales de enfermedad del árbol,si se resquebrajó en una simple tormenta es porque ya estaba muy muy seriamente dañada su madera,si a los primeros síntomas de enfermedad se hubiese reaccionado a tiempo hoy el tejo de Lebeña seguiría vivo. Encima los organismos inútiles ahí presentes ni siquiera han preparado decentemente la tierra para plantar el nuevo tejo,ahí siguen los restos del viejo tejo enfermo(ni han investigado que enfermedad lo mató)probablemente portando el hongo o los hongos que lo mataron y que con muchas probabilidades afectarán el sano crecimiento del nuevo ejemplar,ahí también sigue el entorno del antiguo tronco lleno de las enormes raíces que chupaban los nutrientes de la tierra cercana y sustentaban al árbol, sin ser eliminadas(al menos en un círculo de 1,5 a 2 metros alrededor del nuevo árbol) el nuevo árbol crecerá raquítico,sin acceso pleno a los nutrientes y sin la debida fortaleza para aguantar los envites del tiempo y el clima. Todo una monumental chapuza y una verdadera pena ya que ese tejo se encontraba en un lugar plenamente seguro y alejado de peligros que otros viejos árboles sí tienen a su alrededor.
Un análisis digno de un humano, muy mental y de poco corazón. La energía positiva que toda esa gente canalizó, el amor con que se hizo.... eso es nutriente más que suficiente para que un árbol pueda crecer.