Amada Peng Li, quizas usted creyo que mi amplia devocion y adoracion por usted se limitaba a los tiempos de facil gestion pero no mi amada Peng Li, dejeme explicarle que yo soy su mayor devoto admirador de su tan exquisita belleza, sensualidad y amor, no descanzare mi amada amor hasta yo no llegar a atraer su vital y palpitada atencion, me muero por conocerla y ser su amigo mi amadisima primera dama excel. Peng Liyuan, y recuerda mi amor, que tambien algunos hombres mueren de amor. Boris Alain Nimylowycz Rudd.