Mi nombre es Marisol Delgado y soy organizadora profesional de espacios en tu hogar. Me dedico a transformar tu hogar creando espacios prácticos, productivos y armonizados a través de un sistema de organización de tus bienes materiales y tus hábitos y rutinas. En el vídeo de hoy os voy a enseñar cómo mantener la casa limpia y ordenada. ¡Vamos allá!
1. Organización inicial:
Antes de encargarnos de mantener nuestra casa limpia y ordenada, primero debemos organizarla adecuadamente. En otro vídeo expliqué detalladamente la diferencia entre ordenar y organizar. En resumen, ordenar es llevar cada cosa a su sitio, pero no podemos hacerlo si no hay un lugar previamente establecido. La organización incluye pasos como vaciar, limpiar, categorizar, descartar, contener, colocar y etiquetar.
2. Planificación de tareas:
Una buena organización facilita la limpieza, ya que tener superficies despejadas y elementos bien contenidos hace que todo sea más rápido. Además, una buena planificación nos ayudará a mantener el orden y la limpieza. Primero, debemos planificar nuestras tareas personales y luego las tareas del hogar. Es importante tener en cuenta el horario de toda la familia y asignar responsabilidades de manera equitativa.
3. Reunión familiar y delegación:
Es fundamental tener una reunión familiar para repartir las tareas domésticas. Debemos tener en cuenta los gustos y preferencias de cada miembro de la familia. Muchas veces, las mujeres se resisten a delegar porque creen que los demás no harán las cosas como ellas. Sin embargo, con paciencia y algunas instrucciones claras, todos pueden colaborar. Por ejemplo, un protocolo para poner la lavadora con todos los detalles necesarios puede ser muy útil.
4. Beneficios de la planificación:
Planificar nos ayuda a evitar el estrés de recordar cuándo realizar cada tarea. Nos asegura una periodicidad y nos permite ver claramente todas las tareas que debemos hacer, facilitando su distribución equitativa. Esto también nos permite organizar las tareas según el tiempo disponible cada día.
5. Ejemplos de tareas diarias:
Aquí algunos ejemplos de tareas diarias:
Ventilar la casa al levantarnos.
Hacer la cama todos los días.
Recoger todo lo que haya por medio.
Guardar la ropa en el armario.
Colocar mantas, cojines y jarapas del sofá antes de acostarnos.
Fregar, secar y colocar los platos, y limpiar la encimera.
Preparar la comida.
Poner y quitar la mesa.
Tirar la basura.
Barrer el suelo (un robot aspirador puede ayudar mucho).
Fregar el suelo cuando sea necesario.
6. Estrategias adicionales:
Podemos optar por hacer un mantenimiento básico diario y una limpieza a fondo semanal, o limpiar una estancia a fondo cada día. Lo importante es que el sistema se adapte a tus necesidades y te resulte fácil y manejable. Crear hábitos y rutinas diarias, como limpiar la encimera mientras fregamos los platos, hará que estas tareas se realicen de manera automática y sin esfuerzo.
Consejos finales:
Algo nuevo entra, algo viejo tiene que salir.
Hacer revisiones periódicas para descartar lo que ya no sirve.
Utilizar la regla de los dos minutos: si algo toma menos de dos minutos, hazlo de inmediato.
Colocar todo en su lugar al llegar a casa.
Planificar el día siguiente antes de acostarse.
Sacar todo de su envoltorio y quitar etiquetas si no vas a devolverlo.
Buscar un momento diario para ti mismo, para meditar y relajarte, y así ordenar tu mente.
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10 сен 2024
