Los aviones son considerados como medios de transporte peligrosos por muchas personas, pero si bien existen muchos más riesgos al viajar en carretera, existen situaciones que sí podrían representar un gran riesgo para los pasajeros, como el que la puerta de emergencia se abra. A la altura y velocidades extremadamente altas a las que viajan los aviones abrir la puerta de emergencia mientras estás en un vuelo podría tener resultados bastante desastrosos como lo es la descompresión rápida que despresurizaría la cabina en unos cuantos segundos.
La despresurización de la cabina traería consecuencias como hacer que todos los objetos sueltos, incluyendo cualquier persona que no lleve su cinturón de seguridad sean succionados fuera del avión y eso no es todo, sino que el avión empezaría a deteriorarse debido a la diferencia de presión, poniendo en peligro la vida de los pasajeros restantes. Con ello la temperatura de la cabina disminuiría rápidamente a niveles que podrían inducir la congelación y por lo tanto la disminución del oxígeno disponible para que los pasajeros respiren, a esto sumándole que es mucho más delgado a grandes altitudes provocando hipoxia, desmayos y hasta la muerte para quienes no tengan su máscara de oxígeno.
La altitud junto a la velocidad a la que viajan los aviones hace que la presión sea mucho menor en el exterior que en el interior, por lo que esto genera un efecto como si el interior estuviera empujando hacia afuera continuamente. A esto súmale que las puertas de los aviones están diseñadas para abrirse hacia adentro no hacia afuera de modo que ya es casi imposible que se abran por más fuerte que tire alguna intrépida persona.
15 окт 2024
