Qué pena ver el negocio en lo que se ha convertido la seguridad social donde una doctora que se quiere integrar “más de la cuenta” con sus pacientes es la “diferente” ojalá más doctores se sumen a este tipo De atención a los pacientes porque al final somos todos seres humanos. A nadie le gustaría que a sí mismo o un familiar se le trate como en una fábrica como algo tan automatizado