Desde el principio de su existencia, el ser humano ha intentado conseguir la felicidad bebiendo en fuentes equivocadas.
Hoy aprendemos en el Salmo 1 que la felicidad es el resultado de un modelo de vida que incluye a Dios.
Por ello debemos recordar siempre que ser testigos de Jesucristo no es solamente cumplir la Gran Comisión, es también ofrecer al mundo lo que más anhela: La felicidad verdadera y permanente.
¡Brilla por Jesús!
11 сен 2024