Tercer capítulo de Fábula Silvestre,
En este capítulo encontraremos al Zorro...
Cuando el joven Zorro llegó a su cueva al atardecer, se dio cuenta de que sus padres no se encontraban allí. Eso era extraño, pues ellos siempre estaban en casa cuando él volvía.
"¿Mamá? ¿Papá? ¿Dónde están?" preguntó el Zorro, pero no obtuvo respuesta. Comenzó a preocuparse, pues no había cena preparada y tenía mucha hambre.
Decidió salir a buscarlos. Corrió por el bosque, llamándolos una y otra vez, pero no hubo señales de ellos. Finalmente, llegó a la carretera y los vio tirados, inmóviles.
"¡Mamá! ¡Papá!" gritó el Zorro, acercándose a ellos. Pensó que quizás estaban dormidos, y dejó que descansaran.
Con la voz rota por el dolor que sintió al darse cuenta que realmente habían fallecido, el Zorro susurró: "No siempre brillo". Se acurrucó al llegar a su casa y se quedó dormido, profundamente entristecido.
Pasaron las horas y el Zorro permaneció ahí, sin encontrar fuerzas para continuar. Sabía que ahora estaba solo en el mundo, y que nada volvería a ser lo mismo.
29 июн 2024