Vuestros hijos deben estar tan orgullosos de tener unos padres tan artistas y ingeniosos!!!!. Soy fan de siempre, que humor tan sumamente inteligente . Podriais hacer una parodia de Munercitas y lo que el viento se llevo no? Ahi lo dejo. Posdata....como me he reido en todos los trabajos y sobre todo en el personaje de la Repu que por cierto salis los dos😂😂😂😂😂😂😂😂
Agustina Raimunda y su primer apellido Saragossa ( Zaragoza en castellano ) efectivamente nacio en Reus y sus padres eran de Lleida . Se caso con un tal Juan Roca y tuvieron un hijo que murio en sus primeros años de vida. En segundas nupcias caso con un tal Juan Eugenio Cobos ( baron de Cobos de Belchite ).y tuviron una hija llamada Catalina Cobos Saragossa. A mi parecer estuvo muy vinculada con Zaragoza
*AGUSTINA de Aragón, su acento o mejor dicho su entonación me ha recordado a EL ACENTO DE LOS ANDES EN PERÚ, de cómo habla la gente que tiene como Lengua Materna el idioma Quechua pero que habla algo de Español. Tienen una entonación muy parecida.Y QUÉ ES CHICHA?? Cuando lo dice en el inicio, porque Chicha es una palabra Quechua. Saludos!*
“Chicha” es la forma en que se llama a la carne para los niños pequeños. A un nene de dos o tres añitos le preguntas si quiere un poquito de “chicha” y el nene ya entiende que te refieres a carne. En el contexto en que usa Mota la palabra, “Aquí hay chicha”, significa que hay mucho que contar o que están pasando muchas cosas y hay jaleo. La frase hace referencia a las comidas con abundante carne.
+Sergio Ponce Pues que no se la puede pintar de la manera que lo hizo Mota, simplemente. Es como ponerle acento gallego a chiquito de la calzada... Pero bueno, supongo que era más fácil así.
@@thesapphirem5469 ¿Donde se crio? Pero si trasladó a Zaragoza ya de adulta y casada. Y luego se trasladó a Barcelona y Valencia para acabar falleciendo en Ceuta. Es española, lo demás es secundario, siempre ha habido gran movilidad interna.
Qué pena que no os vayáis a Francia ( y sin volver a mirar hacia aquí ) todos los que decís esas sandeces. Y qué suerte has tenido , oye, de que algún antepasado tuyo no cayera víctimas del delicado genocidio que tus franceses de tu alma cometieron a lo bestia, con saña y brutalidad, en estas tierras.