Alicia Beauvisage nació en El Salvador pero lleva 49 años viviendo en Francia, donde se casó y tuvo una hija. Desde bien pequeña conoció el sentido de la devoción al Corazón de Jesús. El asesinato de su padre, siendo niña, causó un profundo daño en la familia y especialmente en su madre. Una novena al Corazón de Jesús cambiaría la situación. Ser testigo de las gracias que te concede el Corazón de Jesús hace que te enamores pronto de Él, nos cuenta Alicia. "Yo sentía que mi vida le interesaba", dice Alicia, y supo que Jesús siempre le ha mantenido mimada y cuidada en su abrazo. Cuando llegó a Francia, joven e inocente, Alicia Beauvisage conoció una Iglesia distanciada y tibia con Dios. Le recomendaron no manifestar en voz alta sus creencias. Pero ella solo pudo mantener silencio durante 3 semanas. No podía, ni estaba dispuesta a dejar de hablar del amor de Jesús.
El plan de Dios para aquella joven salvadoreña incluía una relación de amor profundo y entrañable con el Corazón de Jesús. "Sentía que mi vida le interesaba y supe que Él había estado siempre presente en mi vida", dice Alicia. Fue pronto consciente de cómo Él la había consolado, abrazado y acompañado en los momentos buenos y en los difíciles. "La gente no es consciente de cuánto le podemos pedir y cuánto nos responde a nuestra súplica el Corazón de Jesús", asegura Alicia. En este vídeo, nos cuenta los detalles de ese enamoramiento del Corazón de Jesús y de cómo comenzó su apostolado en favor del Corazón de Jesús en una tierra árida para los católicos. Un domingo 3 de abril de 2005, día de la Misericordia, acabaría en sus manos una misteriosa reliquia de Santa Margarita María de Alacoque, conocida por haber recibido las apariciones del Sagrado Corazón de Jesús en Paray-le-Monial.
Comenzaría la misión de Alicia de llevar por todo el mundo las reliquias de la Santa. En esa época conocería al padre Edouard Marot, rector de Paray-le-Monial pero no especialmente devoto del Corazón de Jesús. Ambos empezaron a propagar su devoción, para que todo el mundo pueda llegar a enamorarse como ellos. "Se nos ha olvidado que el Corazón de Jesús todo lo puede", afirma Alicia, y lo dice con el fundamento de quien ha sido testigo de muchísimas gracias, conversiones y curaciones obradas por Él.
Después de muchos años llevando por el mundo las reliquias de Santa Margarita, comenzaría otra forma de su apostolado: dar testimonio de su devoción, también junto al padre Marot, allí donde son solicitados o donde Dios quiere que ellos den a conocer el amor del Corazón de Jesús por los hombres, invitando a la humanidad a responder a este amor. "Hoy, -asegura-, el Corazón de Jesús está llamando a todas las puertas y es impactante ver cómo responde a quienes le abren", asegura. "Si el Corazón de Jesús les está llamando y dicen sí, estén seguros de que todo se hará", dice Alicia Beauvisage.
No te pierdas el testimonio de esta mujer locamente enamorada del Corazón de Jesús, y confía.
Música: "Corazón Que Mana", de Grupo salve (Oswaldo y Arce)
Derechos de distribución: Altafonte Network S.L.
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15 сен 2024
