Cera, bronce, fuego, inspiración y unas manos expertas hacen de las esculturas que se presentan unas piezas únicas con alma propia.
Estas figuras, de tema religioso o profano, son auténticas obras de arte salidas de los talleres de los más reputados escultores vivos actualmente en activo. Unos artífices que aúnan lo mejor del pasado y del presente, empleando viejas técnicas y procesos decantados por generaciones de artesanos y artistas durante siglos, incorporando a los procesos su propia experiencia, para lograr los mejores acabados.
Paciencia, destreza y un acabado tan perfecto como delicado, hacen de estas esculturas originales conmovedores que rezuman verdad. La verdad de toda una vida consagrada a la belleza y a conseguir emocionar a todos aquellos que las contemplan.
30 дек 2020
