Oh, el inmortal pueblo de México. Perdió su estatus. Perdió su pureza sanguínea. Perdió su identidad. Perdió su territorio ancestral. Perdió su libertad para no volverla a ver y seguir esperando volar al Iztaccíhuatl. Perdió su orgullo. Pero seguimos aquí, y seguiremos adelante.
Que pureza sanguínea? esa madre es mala en cualquier cultura, ya vez a los reyes de españa y lo deformes que quedaron sus hijos, el rey Tuk ni podía caminar. Los que quedamos ahora somos hijos de los colonos y los rebeldes que se unieron para acabar con el yugo azteca, la historia no es buenos contra malos, es humanos contra humanos