Hablamos de división sexual del trabajo para hacer referencia a la división del trabajo basado en el sexo de las personas. Al igual que el sistema sexo-género, esta distribución es una construcción sociocultural de las tareas que deben realizar las mujeres y los hombres en determinados espacios.
En el mundo del trabajo remunerado los oficios masculinos se diferencian de los femeninos, hay ramas de actividad reservadas prioritariamente a uno u otro sexo, y sectores tradicionalmente masculinizados. Los empleos femeninos están más concentrados en las partes inferiores de la jerarquía ocupacional, suelen ser una extensión de las labores reproductivas y muchas veces son trabajos informales, por ejemplo: manipuladoras de alimentos, cuidadoras de niños, niñas y enfermos, auxiliares de aseo, temporeras, etc.
La división sexual del trabajo genera una injusta repartición de tareas que repercute en la capacidad de las mujeres de conseguir empleos remunerados de forma permanente, este fenómeno tiene directa relación con el desarrollo de la autonomía económica, o sea, la disponibilidad de ingresos propios y la superación de la pobreza, especialmente de los hogares monomarentales.
🎥 Video realizado por Lanpu Films, Miguel González Dames y Jonathan Molina Rojas.
2 окт 2024