La Oración «Gloria Patri»: Acto de alabanza y adoración a la Santísima Trinidad.
un Profundo Acto de Alabanza y Reverencia. El que glorifica a Dios va a Él con su debilidad, su indignidad, su impotencia, su pecado. Es cuando nos entregamos a Dios en estos momentos que más lo glorificamos. Porque entonces dependemos de él para todo, sin hacernos ilusiones sobre nuestra propia «bondad». Glorificamos a Dios a través de la conciencia de nuestra dependencia de Él y anhelamos una transformación continua.
El Gloria en la misa. El primer Papa que introduce este himno en la Liturgia fue el papa Telesforo (128-139) quien la incluye en el Ordinario de la fiesta de Navidad y, luego, Símaco (498-514), que lo generalizó para todas las celebraciones dominicales.
También conocida como «Gloria al Padre», es una antigua oración cristiana que ha sido parte integral de la liturgia y la devoción personal durante siglos.
Es un acto de alabanza y adoración a la Santísima Trinidad:
“GLORIA PATRI, ET FILIO, ET SPIRITUI SANCTO. SICUT ERAT IN PRINCIPIO, ET NUNC ET SEMPER, ET IN SAECULA SAECULOROM. AMEN”
«Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.»
Es una doxología, un breve himno de alabanza a Dios; se le llama la «pequeña doxología» o “doxología menor”, para distinguirla de la “doxología mayor” o “Gloria in excelsis Deo” que es la que se reza en la celebración del Sacramento de la Eucaristía.
La oración «Gloria Patri» es más que una simple fórmula de palabras: es una afirmación de la fe en la Trinidad y en la eternidad de Dios.
Cuando decimos «como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos», estamos reconociendo que Dios es eterno, sin principio ni fin, y que su reino durará para siempre.
Gloria Patri se utiliza en ocasiones al concluir el Credo, el Ave María, el Padre Nuestro o el Rosario.
La palabra Gloria significa honor o fama, por lo que la oración del Gloria nos permite decir en alto, el gozo que supone formar parte de la comunidad cristiana.
¿Cómo se debe rezar la oración de Gloria al Padre?
Debemos tomar en cuenta que se está rezando a la Santísima Trinidad EN SU CONJUNTO Y NO POR SEPARADO.
La forma correcta es «Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo» mientras que nos vamos persignado, es decir, NO HAY QUE SEPARARLOS rezando así «Gloria al Padre, Gloria al Hijo y Gloria al Espíritu Santo», porque, como repetimos, estamos hablando de una unidad Trinitaria.
Son palabras que dan gloria y alabanza a la Santísima Trinidad y expresan una UNIDAD que no se debe separar o desconocer. El dar “gloria” por separado a cada una de las tres Divinas Personas puede inducir al error, porque separa la unidad trinitaria.
RECORDEMOS: ¡Alabada sea la Santa Trinidad, indivisible Unidad!
Si en algún momento de nuestra vida, en la alegría o en la tristeza, en medio de las dificultades o luchas, en la esperanza y en el miedo, cuando tal vez no encontremos las palabras, siempre podemos orar perfectamente para que Dios sea glorificado siempre, y así estaremos orando por todo lo que realmente queremos. En cierto modo, estaremos orando como Dios “ora”, ya que el Salvador oró ante su sufrimiento más profundo: “Ahora, Padre, glorifica a tu Hijo con la gloria que tenía antes del mundo”, es decir, “como fue en el principio, es ahora y siempre será, en un mundo sin fin. Amén."
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30 сен 2024
