Sheldon Glashow, premio Nobel de física, afirmó en una entrevista en un periódico español: "un científico sin cultura humanista hará mala ciencia". Gonzalo Pérez Marc es médico y filósofo, una rara combinación; es médico y humanista, algo no tan raro. Leriche, un médico francés de principio del siglo XX, se quejaba de que "en los hospitales todo ofendía al humanismo". Pérez Marc propone con delicadeza dejar de considerar al paciente como enfermo para considerarlo, mejor, como alguien con una enfermedad. Hay un mensaje humanista en esta conferencia (y en los artículos de Pérez Marc): hay que curar salvaguardando la dignidad del que está hospitalizado.