Miguel salió disparado de la escuela con una cara llena de lágrimas y fue corriendo al cementerio. Le gritó a su madre: “Mamá, levántate ya, has descansado ya bastante. Deberías ir a ver a la maestra y explicarle que si iba a clase sucio era porque tú no estabas en casa”. Al saber el por qué de lo ocurrido la maestra se arrodilló frente al niño y se disculpó.
5 сен 2024