Mi sueño más tranquilo fue que estaba con mi compañera de la escuela por la calle y había un barco en la plaza, entonces subimos y había una estructura que parecía la casa de Calamardo y había un tipo raro con un piyama morado con estrellas amarillas que amenazaba con un sable a otro tipo. Yo y mi compañera los ignoramos y subimos a la punta del barco, y se empieza a volcar. Salimos corriendo y empezaron a caer vidrios y me cayó uno en la pierna y me dolió mucho como si estuviera en la vida real. Después de eso desperté. Cabe aclarar que el tipo del piyama es un señor que conozco en la vida real que toca la flauta en la calle, pero en mi sueño no tenía la flauta. El señor tiene una barba canosa larguísima y pocas canas en la cabeza y ningún pelo, parece de 70 años o más. Tampoco tiene ese piyama en la vida real.