Así es. Reconocer a Dios en nosotros mismos es esperarlo y sentirnos acompañados por El siempre. Sabernos parte de Él, es saber que siempre habrá un mañana. Y el milagro que un gesto que Cristo nos comparte en la comunión es la bocanada de aire fresco , es la renovación , el impulso vital que toda alma en algún momento necesita. Hermosa canción Salomé es Espero en ti. Gracias
