Ver la alegría de Mohamed Salah al ver a su hija imitandole, ver a la gente celebrando el gol de Makka, y que todo el estadio grite el gol de tu Hija, me saco una lágrima este video.
Que tan enfermo tiene que estar un ser humano, para que su subconsciente lo traicione públicamente, pero claro, cuando se publica desde un seudónimo..., que barbaridad!, vergüenza ajena, en el supuesto no consentido, que entiendas lo que quiero decir.