El Instituto Cervantes acogió homenaje a Octavio Paz, con motivo del centenario de su nacimiento, en el que participó Juan Villoro. Más información sobre el centenario del Poeta en laberintos.delpoeta o laberintosliterarios.com
Admiro enormemente a Juan Villoro esa capacidad de hablar, narrar y matizar los argumentos. Ideas, vivencias y emociones lo hacen un crisol del conocimiento puro, un eslabón más de la Literatura y del Arte. Un embajador más, después de Carlos Fuentes Y Octavio Paz; que va por el mundo diciendo a todos quiénes somos, por qué somos; qué es México ante el mundo y, cómo lo mexicano ha tenido voz, memoria, historia y compromiso universal. Gracias, gran Maestro Juan Villoro.
Adicional a este esfuerzo de Octavio Paz por describir al mexicano, en su obra el laberinto de la soledad` debo mencionar que existe un libro de un autor poco reconocido en Mexico pero de gran valia, Aniceto Aramoni y el libro se llama 'El mexicano, un ser aparte'
El gran adversario de Octavio Paz ha sido, y será siempre, el querer analizar sus textos. Analizar a Paz, y sobre todo, querer explicar sus intenciones del discurso, siempre serán trabajos estériles. Criticado por muchos, la mayoría; amado por otros, los eternos inadaptados a la idiosincrasia mexicana. O. Paz es de esas pocas garbanzas de libra que en México son reprobadas por ser de libra. Hoy día, cuando México es distinguido, reconocido, y valorado por " el chavo del ocho", "el chapo Guzmán" y lo "transas" que somos para destacar; el trabajo de los ensayos, el desgaste por hacer las cosas bien; y, peor aún, por ser lineal y recto en la pertenencia mundial, ser crítico, auto crítico y, más loable aún, ser crítico de la patria, es, y será un acto reprobado por la costumbre destructiva y permanente de un país en vías de desarrollo. Gracias por ser de una verdad crítica, flagelante e inexorable. Ojalá algún día logremos entender la verdad de nuestros orígenes y dejemos la eterna evasión de lo que somos por querer ser lo que ni en sueños hemos cavilado.
Me parece ridículo que el presentador diga que Alfonso Reyes, Carlos Fuentes, Paz y Pacheco son mexicanos que han aportado bastante a la lengua española. ¿Dónde me deja a Juan Rulfo, Elena Garro o los contemporáneos, tan solo limitándonos al siglo XX? Su ignorancia se limita al amiguismo con el que funciona el Instituto Cervantes. Si Cervantes viviera, una sátira o una farsa les haría.
la representante del centro de estudios mexicanos de la unam hace una pobrisíma presentación ademas de que se avienta un filón de agradecimientos todos muy correctitos pero innecesarios...deplorable
