De Nicolás Guillén (1953) y Horacio Salinas Un Son para Cándido Portinari Para Cándido Portinari la miel y el ron, y una guitarra de azúcar y una canción, y un corazón. Para Cándido Portinari Buenos Aires y un bandoneón. Ay, esta noche se puede, se puede, ay, esta noche se puede, se puede, se puede cantar un son. Sueña y fulgura. Un hombre de mano dura, hecho de sangre y pintura, grita en la tela. Sueña y fulgura, su sangre de mano dura, sueña y fulgura, como tallado en candela; sueña y fulgura, como una estrella en la altura, sueña y fulgura, como una chispa que vuela... Sueña y fulgura. Así con su mano dura, hecho de sangre y pintura, sobre la tela, sueña y fulgura, un hombre de mano dura. Portinari lo desvela y el roto pecho le cura. Ay, esta noche se puede, se puede, ay, esta noche se puede, se puede, se puede cantar un son! Para Cándido Portinari la miel y el ron, y una guitarra de azúcar36 y una canción, y un corazón. Para Cándido Portinari Buenos Aires y un bandoneón.