AMLO es un presidente idiota, ha olvidado a los campesinos y las madres buscadoras y los enfermos del campo, sus hijos y colaboradores son los que ahora arremangan con los contratos y al pueblo lo estan matando de hambre y con el narco y digo al verdadero pueblo no a los acarreados vividores que el les dice pueblo.
Como lo va recordar si es opresor de los campesimos la grandes companñias le pagan para que se haga el sordo .. hasta el hablado cambio para no hacer nada el corrupto salio peor que todos
Molina es el claro ejemplo que la televisión y los medios nos dan a consumir lo que ellos planean que consumamos ( los dueños del dinero) como comparar a este poeta con Luis miguel Alejandra Guzmán. Ah y todavía hay quien lo duda y se sienten que son libres de elegir uno u otra porqueria.
Los verdaderos artistas no salen en la TV. Hay muy contadas excepciones a esta regla. De hecho el arte es algo mucho más elevado que creo que escapa a la comprensión de la mayoría. Bajo esta premisa, no podría yo considerar a José de Molina un artista, y mucho menos a los que tú mencionaste (esos son parásitos de la industria), pero es verdad que el caso de José, Amparo Ochoa, León Chávez Teixeiro y cantores de la misma línea, son el tipo de personalidades que, dentro de la música popular, a mí me inspiran. Y no los han dejado brillar porque ellos inspiran también ese auténtico sentimiento nacional que rebasa los artificios del bigotito, el sombrero, el tequila, la virgen y todo lo que nos han dicho que es México; inspiran ese deseo de mirar al México profundo, de alcanzar la justicia, la equidad... ¿Qué pueden inspirar Alejandra Guzmán, Ángela Aguilar, Vicente Fernández y todos esos falsos artistas? Ellos no persiguen nada sino sus propios intereses y su hambre de dinero. Pero el pueblo les ama y pasarán a la historia como los grandes ídolos...cuando fueron basura. Como conclusión, hay más de artista en José de Molina que en Luis Miguel. Pero uno está condenado al olvido y el otro a ser recordado siempre como uno de los grandes ídolos de México. Triste pero real.
