Personalmente, he generado gran inquina contra la percepción occidentalizada de la paz. Por ejemplo, se publicita el trato inmigrante de la UE como digno, pero luego se financian a países terceros para mantener esa inmigración duramente reprimida. Se habla de pobreza, pero pienso que la riqueza precisa de ésta, pues siempre habrá países sumergidos en un frenesí de violencia por los múltiples intereses geopolíticos de nuestras "dignas" democracias (o al que toque en su defecto). En fin, los valores son necesarios en la práctica individual, pero espero el día en que surgan movimientos intelectuales que le den la vuelta a toda esta percepción idealizada, y que sobretodo enfrenten el problema de cara. Desarrollemos sistemas de poder más justos y organizados, donde la ponzoña de la corrupción (económica y política) permanezca mermada. Si tiene éxito... Se extenderá una nueva paz
