El avance tecnológico de China es percibido como un riesgo no sólo en EE. UU. También Alemania pierde terreno en sectores que dominaba cómodamente, como el de maquinaria industrial o el automotor, ante el gigante de Asia. Y no solo en el mercado internacional, también dentro de las fronteras alemanas. Berlín y la Unión Europea acusan a China de "inundar" el mercado con sus productos, como siempre más baratos y ahora también de tecnología puntera. Las empresas chinas, que reciben cuantiosas subvenciones del Estado, rechazan las acusaciones de competencia desleal y denuncian un cambio de reglas justo cuando su ventaja competitiva empieza a notarse en los mercados occidentales.
26 апр 2024
