Vienen ganando fuerza sectores políticos que nos hablan de, volver a la familia, de proteger a la familia y de retomar los viejos valores. Elección tras elección y campaña política tras campaña política, diversos actores políticos y religiosos, presentan un discurso de tono apocalíptico sobre la amenaza que pesa sobre la familia y los valores tradicionales. No importa el país, vemos que este fenómeno se viene repitiendo a lo largo y ancho de toda Latinoamérica y más allá. Generalmente estas apelaciones proceden de grupos políticos vinculados a las derechas religiosas (ya sean católicas o evangelistas), pero también es frecuente encontrar este tipo de discursos en políticos de la derecha liberal que no dudan en apelar al discurso pro familia y anti Ideología de género, signifique esto, lo que sea que quiera decir. El feminismo, los movimientos sociales, la visibilización de la cuestión LGBT, se han convertido en los nuevos antagonistas de los grupos conservadores que vienen impulsando con vehemencia el concepto ideología de género. Un sintagma acuñado por la Iglesia Católica, que viene siendo impulsado por las iglesias neopentecostales, las derechas alternativas y otros sectores políticos y sociales conservadores. Poco importa que sea un concepto sin un sustrato académico real y que no tenga más valor descriptivo que otras ideas conspirativas, como la conspiración mundial judía. En un tiempo donde la política se vive al ritmo vertiginoso de las fake news, las teorías de conspiración y los liderazgos mesiánicos populistas, el concepto de ideología de género ha calado hondo en varios sectores políticos y sociales de la región. Quienes no tienen, por supuesto, ninguna clase de reparos morales en inventar falsedades, calumnias y mentir descaradamente con tal de lograr sus objetivos políticos. La debilidad mayor de este discurso pro familia estriba sin embargo en su horfandan propositiva. Más allá de su evidente valor aglutinador y de la lógica polarizadora que logran a la hora de identificar un enemigo común que permita unir fuerzas, ganar elecciones u obtener bancas. De qué están hablando realmente? Llama la atención lo ilógico de muchas de sus miradas y es que bajo el paraguas ideología de género, terminan compilando una cantidad de temas y de cuestiones que no tienen relación directa unas con otras y que generalmente tienen su origen más en los cambios sociales que en oscuras conspiraciones de la izquierda, el marxismo internacional o vaya a saber uno qué fuerzas demoníacas. Temas como la crisis de la familia, la despenalización del aborto, el aumento de las tasas de divorcio, la visibilización de la diversidad sexual, los cambios en los roles de género, el matrimonio igualitario, la inclusión de planes de educación sexual y hasta la aparición de personajes LGBT en series o películas (si, así como lo están leyendo). Son denunciados como productos de una especie de conspiración para destruir la familia y los valores tradicionales del Occidente cristiano. Todo ello simplificado en el cuco de la ideología de género. Pese a que, una mirada más atenta permite darnos cuenta de que no existe ninguna relación causal entre una cosa y otra, más que la propia dinámica de los cambios epocales que vivimos. Donde algunos ven ataques a la familia, nosotros lo que vemos es el resultado de procesos sociales, culturales, demográficos y hasta económicos, que lejos de haber sido impulsados por fuerzas oscuras. Son el resultado de realidades que se enmarcan en la propia modernización de la sociedad y en los procesos que solemos denominar transición demográfica. Que se haya producido una disminución en la tasa de nupcialidad, que las mujeres ya no tenga deseos de tener tantos hijos y prefieran por el contrario tener un desarrollo personal desde roles no exclusivamente tradicionales, que haya aumentado la tasa de divorcios, que la familia tradicional nuclear, ya no sea el único modelo existente o que la sexualidad haya sido liberada de una visión exclusivamente reproductora ("sexualidad plástica", como la denomina Giddens (2). Son solo algunos de los resultados de la transición demográfica, de la modernización y urbanización de la sociedad. Son procesos que se dan en sociedades urbanas y de clase media, es decir, sociedades modernas (sociológicamente hablando y no entrando en juicios valorativos). Entonces, cuando ellos se denominan profamilia y piden volver a los valores, qué políticas concretas van a implementar? Qué acciones políticas pretenden impulsar, en caso de obtener más poder? Porque de eso se trata el asunto. Para enfrentar esas amenazas, que según ellos, existen sobre la familia y los valores. Qué políticas concretas van a impulsar desde el poder político? Obligar a la gente a casarse? Para aumentarla tasa de nupcialidad? Derogar el divorcio? Exigir un certificado de virginidad a quienes se casan? Exigir el compromiso de tener hijos a los recién casados para combatir la baja en la tasa de natalidad? Prohibir las manifestaciones públicas de la homosexualidad en los medios de comunicación, internet y la vida cotidiana? Derogar todas las leyes de las llamadas nuevas agendas de derechos? Qué significa en concreto ser profamilia? Qué significa en concreto la frase vamos a erradicar la ideología de género? Toda la idea misma de volver a los valores de la familia es ridícula porque desconoce las realidades sociales. Los cambios que enumero más arriba lejos de atenuarse se van a ver incrementar en las próximas décadas. Porque la sociedad posmoderna, líquida, hiper moderna, o como la quieran llamar, ambienta una sexualidad y una construcción de la vida personal muy individualista. Realidad que simplemente les van a pasar por arriba a los sectores conservadores. Detrás del discurso profamilia solo existe una estrategia para generar poder por medio de construir un enemigo contra el cual unir fuerza. Su objetivo inconfesable es la relegitimación de la homofobia y la misoginia en el ámbito social. Se trata de una actualización de los discursos del pasado a las nuevas realidades, con el fin de construir una base electoral en base a legitimar mecanismos de discriminación y exclusión social. Lo que constituye la esencia del proyecto de los populistas de derecha. Hay que recuperar los valores de la familia, frase vacía como pocas en la política. Es un decir, con un claro tono reaccionario. Un eslogan para reunir a gente que piensa que existe la marcha atrás y que es posible volver a un tiempo pasado, que en general, se presenta falsamente como idílico. La creencia en una esencia pura e inmutable, que fue de alguna manera contaminada por el devenir histórico. Estemos atentos a estos discursos. Porque constituyen una parte esencial de la estrategia política reaccionaria que sacude al mundo.
Te proyectas mucho don resentido. La homofobia y la transfobia son formas de prejuicio y discriminación que involucran reacciones negativas y de miedo hacia las personas que se identifican como homosexuales o transgénero, respectivamente. Desde un punto de vista psicológico, la homofobia y la transfobia pueden entenderse como defensas psicológicas contra los propios miedos y la incomodidad que algunos individuos experimentan en relación con su identidad sexual o de género, aunque también pueden estar basadas en prejuicios socioculturales o creencias religiosas. En algunos casos, la homofobia y la transfobia pueden ser una forma de proyección, un mecanismo de defensa donde las personas atribuyen sus propios pensamientos, sentimientos o temores no reconocidos a otros. En este caso, alguien puede tener miedo o inseguridad sobre su propia identidad sexual o de género, y en lugar de lidiar con esos sentimientos, proyecta esos miedos hacia otros, resultando en comportamiento homofóbico o transfóbico. Además, estos prejuicios también pueden estar asociados con una mentalidad de "nosotros contra ellos", lo que en psicología se conoce como sesgo de endogrupo-exogrupo, donde se favorece al propio grupo (endogrupo) y se discrimina o se tiene prejuicio contra el otro grupo (exogrupo). Es importante resaltar que la homofobia y la transfobia, al igual que cualquier forma de prejuicio y discriminación, pueden causar graves daños psicológicos en las personas que las experimentan, incluyendo depresión, ansiedad, y baja autoestima. La superación de estos prejuicios implica, a menudo, un proceso de educación y auto-reflexión para desmantelar los estereotipos y las percepciones erróneas, y para fomentar la empatía y la comprensión hacia las personas de todas las identidades sexuales y de género.
regalo par que uses como quieras: La ideología de género no existe. No existe por que no es una entidad real sino una fantasía creada, fomentada y promovida para proteger otra ideología diferente. Es una técnica antigua y probada: te inventas un demonio para que tu busques como salvarte de el y adivina quien soy la solución. Eso es una entelequia. Algo que parece real pero no lo es. “Ideología es: “Conjunto de ideas que caracterizan a una persona, escuela, colectividad, movimiento cultural, religioso, político, etc.” RAE. “Genero: Grupo al que pertenecen los seres humanos de cada sexo, entendido este desde un punto de vista sociocultural en lugar de exclusivamente biológico. RAE. Para comenzar, no existe unidad de ideas sobre las características que la sociedad asigna a hombres y mujeres. No hay ninguna persona, escuela, colectividad, movimiento cultural, religioso, político, que haga defensa de los problemas que resultan del genero de la persona ni de su identidad sexual. Nadie promueve, nadie defiende, nadie enseña, nadie financia a la ideología de género, por que no la ideología de género no existe. La ideología de género es una fantasía diseñada, difundida y alentada para condenar en conjunto diferentes situaciones humanas completamente disímiles y heterogéneas, para repartir culpas en grupo, aunque la culpa, en sana lógica, es un asunto personal. Es un raciocinio similar a la inquisición y los herejes. Así es posible que las personas que exigen respeto por derechos humanos queden relacionadas directamente con quienes definen políticas de educación o defiendan el aborto, todos dentro del mismo linaje de ideas. Por esa razón, la evaluación moral de la “ideología de género “ es una falacia. Una falacia de mala fe. Por otro lado, muchas de las ideas amparadas por esta denominación tienen sólida, abundante y bien sustentada evidencia científica con trabajos de investigación que están disponibles para quien los desee, opiniones de cortes internacionales de derechos humanos, artículos específicos en las constituciones políticas nacionales y leyes civiles y penales de protección a minorías. Pregunto entonces quienes son los personajes que SI están involucrados en la ideología de género? y ¿quienes son las personas que publicitan, promueven, opinan y califican a la ideología de género? No son muchos y es posible identificar a los pocos voceros que ponen la cara de este proceso más relacionado con la inquisición que con la razón. Trate usted de encontrar un artículo, investigación, evidencia, publicación científica seria sobre ideología de género. Todas las referencias al tema proceden del mismo grupo de instituciones que paradójicamente predican amor. Resulta además lamentablemente frecuente la publicación de datos falsos, trabajos científicos amañados y conclusiones irresponsables y tendenciosas. El famoso estudio Regnerus es un ejemplo prominente. Cuando usted pide a una persona que defina que es y a quienes incluye la ideología de género se hace el silencio. Cientos de personas hablan con entera libertad, juzgan de terrible la ideología de género hasta el momento que se les pide que expliquen cuales son las ideas especificas que descalifican y que leyes han sido violadas. El asunto es que este es un tema que exige conocimientos y los personajes que promueven este tema no quieren que circule la información pertinente sino que las ovejas sigan a su caudillo. Pocas personas conocen como se construye la identidad sexual de un individuo: Una persona incluye elementos de origen biológico, social y legal. La biología determina sexo anatómico, cromosómico y hormonal. La orientación sexual, fundamental en la identidad sexual, está demostrado que tiene un fuerte componente genético. El genero, es decir las características personales como hombre o mujer, dependen de decisiones personales y la expresión de genero define como la persona se manifiesta como ser sexuado dentro de la sociedad El sexo legal es parte de la identidad política de la persona y dependen del sexo asignado al nacer y los cambios en esa asignación amparados por la corte interamericana de derechos humanos. Todos estos elementos constituyen la identidad sexual del individuo. Queda claro que en la identidad sexual hay elementos que no se pueden cambiar, elementos que la persona puede expresar a su gusto y amaño e inclusive, hay expresiones que la sociedad impone a la identidad de género del individuo. Es lamentable que aparezcan opiniones sobre este tema sin siquiera conocer las definiciones básicas. Este no es un asunto de democracia, es un asunto científico. Si usted revisa las declaraciones de Agustín Laje y Nicolas Marquez, encuentra esta definición:: "Es un conjunto de ideas anticientíficas que con propósitos políticos autoritarios vinculados al proyecto de la nueva izquierda, desarraigan a la sexualidad humana de su naturaleza y la explican monopólicamente por la cultura. Esto significa que, la Ideología de Género existe cuando se nos dice que lo realmente importante de la sexualidad es la construcción social del género." Esta definición no aportan una sola idea que de claridad, precisión, forma ni sentido a que ES la Ideología de género. No expresa cual es la forma, características y limites de lo que pretende definir, solo da su opinión sobre la evaluación moral personal de los autores sin especificar razones. Esta pensada para causar efecto pero no para ayudar al entendimiento, por que no les conviene ideológica ni económicamente que la gente entienda que dicen. También por eso sus charlas abundan en nombres de autores Foráneos, palabras complejas y combinaciones de ideas irracionales, que buscan bloquear la comprensión real de lo que dicen y promueven. ESE es el entrenamiento real del señor Laje, usa técnicas especificas para confundir espectadores y luego presumir que nadie logra debatir sus ideas. El problema es que no es necesario debatir sino expresar ideas claras, que una persona normal pueda ENTENDER y evaluar. Usar técnicas de comunicación de este tipo, no es decente. Eso ocurre por que la ideología de género es una fantasia creada y promovida para crear miedo y cobrar dividendos. No es una entidad real. Aquí a lo que hay que poner atención es que buscan los 5 o 6 personajes que son la fachada de la campaña anti ideología de género. Buscan crear miedo entre las personas que no tienen por que estar capacitadas para evaluar un grupo de temas científicos, legales y politicos que exigen una preparación previa. Buscan PODER para si mismos y para su grupo. Quieren que la ideología religiosa sea impuesta y tener los mecanismos de presión necesarios para lograrlo. Buscan no ser desenmascarados como ideólogos de pacotilla.
