Los cinco porticos para llegar a un corazón solitario [Padre Ricardo López Díaz] 

Eso de escuchae es lo que ustedes hacen ustedes los sacerdotes con nosotros. No tengo la habilidad para escuchar, los sacerdotes nos acogen y entusiasman a seguir viviendo, no importando nuestras situaciones, sino entregánoselas en manos de Dios por medio de su escucha y de sua consejos. He pensado en los seminaristas que salen y los veo muy piadosos. ¿Por qué no siguieron, eran de familias cercanas a Dios? Ahora reflexiono, no tuvieron la capacidad para conllevar toda su vida aquello que es ser un buen Sacerdote. Es muy difícil su vocación, tendrán como la vida juvenil ganas de bailar, de tomar, de nadar, es normal. Más las personas se escandalizan y siempre son criticados por cualquier detalle. Pido a Dios sean siempre respetados porque no sabemos toda su carga. Últimamente he visto muchos videos de sacerdotes que sienten soledad, como dijo usted, esta la familia reunida más no conversando. Les enviamos muchos mensajes con cariño, pero no nos conocemos para darle un apretón de manos. Padre mi abuelita paterna me enseñó a apreciarlos. Íbamos a la misma parroquia todos los domingos con ella, yo desde pequeña pensaba cuando el Sacerdote decía: "El Señor este con Vosotros" y como nos sentábamos en las primeras bancas, me imaginaba se dirige a nosotros porque ya nos vió el domingo anterior. Luego cambiaron a ese Párroco a otro templo, me preguntaba mi abuelita ¿cómo se llamará el nuevo? Mi papá compraba el periódico diario y allo veíamos la fotografía del nuevo sacerdote que estaba impartiendo un sacramento. Ya le comentaba el nombre del que había llegado a la parroquia. Después deseaba que me casara el P.Rivera, luego llegó el P. Agapito, mejor que me case él, después el Padre Tobías. Sólo quería llegar con el novio y de blanco luciendo mi vestido por todo el templo, que el Sacerdote habló muy bonito en la homilia y allí terminó todo. Nunca imaginé uno o más hijos, una casa, nada lo único la ceremonia del matrimonio con el Sacerdote que llegó. Ya de adulta le platique a mi mamá y me dijo dónde dejarías a tu esposo, no sé él que se fuera a su casa y yo a la mia. Por fin nunca me casé, fui a un Retiro Espiritual el Padre habló de las tres vocaciones y dijo que la soltería tiene más hijos espirituales. Soy profesora, trabajé con alumnos de Secundaria 22 años y ahora estoy en el Centro de Maestros capacitando profesores y responsable de la biblioteca. Hay una Coordinadora nueva que sabe que soy Responsable de la biblioteca y ya no imparto cursos, aclaro faltas de redacción a mis compañeros. Hay varios que viven en adulterio, les propogo que se casen, aunque no hagan fiesta con muchos invitados, no pueden económicamente. Uno tiene dos hijas quinceañeras y él hace poco se casó por el Civil. Una viuda que deseaba desde secundaria casarse con un compañero ahora sólo hizo que se divorciara, vivió con ella un tiempo y regresó a donde trabajaba con un buen sueldo, pero con la maldad de estar divorciado. Hablé con ella le dije ud. ya experimentó la vida matrimonial, no rompa esa pareja, ni modo somos tercos. Estimado Padre me agradan sus pláticas, me parecen cortas y se las envío a algunos de mis contactos para que aprendan y se deleiten con sus comparaciones, lo que sucedió en el tiemo que Cristo vivió con los apósteles y la actualidad que vivimos. Dios y la Santísima Virgen lo protejan siempre.