En los meses cálidos de verano en New York, cuando el sol ilumina los rascacielos y las bulliciosas calles de Manhattan, existe un refugio que parece haber sido transportado directamente desde la costa oeste: Rockaway Beach, la joya de Queens y la playa urbana más extensa de Estados Unidos. Con 11 kilómetros de costa bañados por las aguas claras del Atlántico, Rockaway Beach se ha convertido en un destino codiciado tanto por locales como por turistas en busca de un respiro del ajetreo de la ciudad. Aunque está situada a una distancia considerable de Manhattan, su accesibilidad mediante la línea A del metro hasta Beach 90th Street o el NYC Ferry desde el Pier 11 en Wall Street por 4 dólares el tramo por persona hace que el viaje valga la pena. Este trayecto ofrece vistas panorámicas de la Marina y es solo el comienzo de una experiencia relajante y revitalizante.
Rockaway Beach Una playa arenosa y extensa, y una rambla de 9 km atraen a muchas familias a la playa Rockaway en verano para nadar, tomar sol y practicar deportes como voleibol y skateboarding. Los vendedores de temporada ofrecen pizza, arepas y helado italiano, y los bares tienen patios animados. Los surfistas aprovechan las olas durante todo el año en toda la costa. Condominios y casas en tono pastel, muchos reconstruidos después del huracán Sandy de 2012, bordean las calles, al igual que las torres de apartamentos de la década de 1960. NYC Ferry es una red pública de rutas de ferry en Nueva York operada por Hornblower Cruises. A septiembre de 2020, esta cuenta con cinco rutas, así como una ruta estacional, que conecta 21 muelles de ferry en El Bronx, Brooklyn, Manhattan y Queens.