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El poema:
No soy Mexicano pero en mi corazón y en mi ser
México, tienes tu lugar y me has visto crecer.
Soy alemán de nacimiento, polaco en mi linaje,
Pero en este país me quedo, ya no estoy de viaje.
En México, la Bandera, el Himno con toda pasión,
Todos unidos, celebramos esta nación.
Con orgullo gritamos, en cada corazón se puede ver,
Que el amor por México siempre va a permanecer
La banda es puro cotorreo, la cerveza en banqueta sabe mejor
la Doña hace tortillas a mano, su esposo puro chambeador
La quesadilla lleva queso o no, con champiñon o huitlacoche
problemas y la raza aquí hasta festeja su boda toda la noche
con una urraca famosa.. allá por la rumorosa.
Un país de fresas, mandilones y generación de cristal
rico, pobre, naco, la frente con o sin nopal
Aquí somos hermanos, carnales y vatos de verdad,
Unidos por la vida, el país, el amor y la amistad
No tengo en mi familia a alguien mexicano, hermano ni hermana,
Pero los mexicanos nacemos donde nos da la chingada gana.
Unidos con Dios, en fe adelante, nunca atrás
porque el respeto al derecho ajeno es la paz
México, te la rifas, fui escuincle y me diste hogar,
hasta a una de tus hijas me permitiste apapachar.
Mi vida aquí, entre retos y logros, es una gran bendición
en Alemania no pero aquí sí, estoy orgulloso de la nación.
Voy a terminar pero es dificil encontrar algo que rime con México.
No hay nada que a mis oídos les suene lógico.
No cantinfleo, escojo lo más estrategico
para despedirme y decir.. Viva Mexico
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En el corazón de México, en cada rincón de esta tierra llena de historia y diversidad, late el orgullo nacional de los mexicanos y mexicanas. Aunque no nací en estas tierras, he encontrado mi hogar aquí, donde la independencia se celebra con pasión y el espíritu festivo llena las calles cada 15 de septiembre. Mi nombre es Thomas, un joven alemán que, como tantos otros, ha sido acogido con los brazos abiertos por esta patria que es México.
A pesar de no tener raíces mexicanas en mi linaje, siento un profundo amor y respeto por este país que me ha visto crecer. México, con su rica cultura, su gente cálida y su historia llena de héroes, se ha convertido en una parte inseparable de mi vida. En este video, quiero compartir contigo mi experiencia y reflexiones sobre lo que significa vivir en México y celebrar su independencia.
El 15 de septiembre es una fecha que resuena en todos los corazones mexicanos. En esta ocasión tan especial, se conmemora el grito de independencia, un evento que marcó el inicio de la lucha por la libertad y la autodeterminación de México. Es un día de festejo, de unión, en el que todos los mexicanos y mexicanas, sin importar su origen, se unen para celebrar la patria que los une.
El orgullo nacional se hace evidente en cada rincón de México durante estas festividades. Desde las calles adornadas con la bandera tricolor hasta la entusiasta interpretación del himno nacional, el amor por México se desborda. Las familias se reúnen para compartir comidas tradicionales, como las deliciosas quesadillas, y la cerveza sabe aún mejor en una banqueta llena de risas y camaradería.
México es un país de contrastes, donde la riqueza y la diversidad se entrelazan en una danza fascinante. Aquí, la tradición se mezcla con la modernidad, y las costumbres de antaño conviven con la innovación del presente. La gastronomía es un claro ejemplo de esta diversidad, donde las tortillas hechas a mano por Doña se combinan con sabores exquisitos como el huitlacoche.
En esta tierra de lucha y perseverancia, el pueblo mexicano celebra la vida con pasión. Los problemas pueden ser grandes, pero la raza mexicana tiene una habilidad innata para encontrar la alegría en las pequeñas cosas y disfrutar de la vida al máximo. En las fiestas, como las bodas que duran toda la noche, la hospitalidad y la diversión son la norma.
En México, somos hermanos y hermanas, carnales y vatos de verdad. Aquí, el respeto mutuo y el amor por la patria son valores fundamentales. Recordamos las palabras de Benito Juárez: "El respeto al derecho ajeno es la paz", y eso nos une en una comunidad diversa pero unida.
Mi vida en México ha estado llena de retos y logros, pero cada día es una bendición. En Alemania, nunca sentí el arraigo y el sentido de pertenencia que he encontrado aquí. México me ha permitido crecer, aprender y, sí, incluso apapachar a una de sus hijas.
Y así, con estas palabras que no riman pero que expresan mi profundo sentimiento, me despido. En esta tierra de contrastes y colores, en esta nación llena de historia y orgullo, digo con todo mi corazón: ¡Viva México!
14 сен 2023
