En este caso el entrevistador sería como un hombre que vivió superficialmente pero murió con dignidad, y Pablo como un hombre que vivió con profundidad pero a último momento lo venció el diablo y murió "pataleando": al entrevistador se lo ve tranquilo y digno a pesar de no tener la profundidad de Pablo, y a Pablo a pesar de su profundidad se lo ve contestando apurado, tartamudeando, y y y repi pi pitiendo las las las palabras. Dado que Pablo también es un "comunicador" debería trabajar su manera de hablar.
No se puede juzgar tan solo por las percepciones sensoriales a una persona. Esto nos aporta información pero de ahí a saber cómo ha sido su evolución o cómo derivará su vida hay un abismo.
