Enhorabuena a todas las mamás y papás valientes que luchais por vuestras familias hasta el desfallecimiento. Vosotros y vosotras sois los que de verdad levantais el país 👏👏👏👏
Madre mía! Qué impresión me ha dado!!! Tengo al tercero con 2 semanas y me ha dado la sensación de que me estabas leyendo la mente y me has hecho el vídeo para mí.
Que mala es la exigencia, el ama de casa esta infravalorada sobre todo por las mujeres que trabajan... Y hay que tener mucha personalidad para hacer lo que debemos hacer y no hacer caso de las criticas y de las consejeras. muchas gracias por contarnos tu experiencia.
GRACIAS, GRACIAS ,GRACIAS, Esa es la conclusión a la que llegue yo después de tener a mi segundo hijo. Cuando tenia este 7 meses entre en depresión. Tuve que para y poner "" km 0 "" como dices tu. Y 17 años después me va fenomenal esa táctica. Muchas gracias, por explicar esto que a muchas nos pasa. Te escribo con el link de mi hijo el pequeño , me llamo Olga. Muchas gracias-
Totalmente es así, oye puedes subir algun video de cómo organizais a la hora del baño? La comida como la organizas? La haces a diario? O el día anterior?
Me encanta que hoy hayas empezado en plan feminista. Pareces del club de las malas madres. No, toda la sociedad no te dice que estés divina de la muerte todos los días y que la casa no es un trabajo Eso lo asumimos nosotras porque es lo que él heteropatriarcado quiere decirte. ¿Trabajas a 24 horas todos los días del año? En tu caso tu marido gana un pastizal y puedes mantener 11 hijos y pagar una canguro Plantéate trabajar fuera de casa y repartir el trabajo del hogar con tu pareja. Que no te ayude, que se corresponsabilice. Él es el padre ¿No?. El también come, usa el baño, duerme en la cama, lleva ropa... ¡Qué el pobrecito trabaja mucho fuera! Toma y tú también. Además arréglate, no lleves esa pinta y sal más allá del supermercado, los colegios, la eucaristía y las convivencias. Trae un sueldo a casa, no te importa de lo que sea. No seas una falsa mantenida. Y dijo falsa mantenida porque aunque él traiga el dinero a casa la que más trabaja eres tú. Cuando yo tuve la primera de mis hijas me tuve que incorporar al trabajo a las 16 semanas, un poco más tarde porque después me tomé las vacaciones. No creas que yo soy como tu vecina princesita, yo soy una mujer con diversidad funcional y me encargaba de traer el dinero a casa. Mi marido tenía trabajos espontáneos y se encargaba de las labores domésticas. La parte más dura la hacia él. Pero lógicamente la que daba de mamar era yo, así que con el nacimiento de mi primera hija la cosa se complicó. Tuve grandes problemas de salud y cuando me fui a trabajar estaba casi para pedirme una baja, pues descansé. No te lo creerás pero descansé. Así que pasa de esos estereotipos que tú dices que te exige la sociedad. Te lo sé que porque tú misma dejas que te los exija. Y no creas que te lo digo desde una postura aburguesada. Mi marido enfermó y falleció muy joven y a mí se me presento otra enfermedad altamente discapacitante. Soy dependiente en grado III (el máximo según la ley). Pues de dependiente nada, que me puse el mundo por montera (¿Por qué haré símil taurino si soy antitaurina?) y aquí me tienes. Madre de dos mujeres libres e independientes, están acabando su carrera universitaria que nunca le faltó de nada. (Salvo el amor de su padre que no fui yo quien decidía apartarlas, simplemente la vida se lo llevó) Ten en cuenta que digo la vida se lo llevó porque no quiero buscar culpables. No quiero culpar a un Dios todopoderoso qué se define como el amor en sí mismo. No guardo ningún rencor, ocurrió y eso me hizo ser la mujer fuerte que soy. Sé que tú me puedes decir que has criado 11 y que tienes alguno más en el cielo y que yo sólo tengo dos. Pero ambas sabemos muchísimo de la vida experiencias distintas. Así que disfruta la tuya y no te encierres en que ser madre es lo único que puedes hacer. Vales mucho y aunque la maternidad es la responsabilidad más valiente y difícil de esta vida, hay vida más allá. Como tú has dicho tienes que valorar a tu pareja, pero para valorarla tienes que verlo como un igual, no como ese proveedor con derecho a no ser nada o casi nada en casa. Vístete bien, sal, baila (más allá de lo que lo haces en la eucaristía). Y si algún día quieres acordarte de mí, baile un tango con taconazos de aguja (aunque no sepas hacerlo) y le dices al de arriba que lo haces por mí que nunca he podido hacerlo. Y cuando yo de esos apapachos tan fuertes (palabra que tú utilizas y que mi hija aprendió en México) me acordaré de ti luchando por tus 11 hijos. No te escandalices si no siguen tus pasos, déjalos que estén dentro o fuera del camino. No es verdad que fuera sola esté el infierno, hay mil y una manera de ser feliz y cada uno recorremos nuestro propio camino. Te reconozco que yo también quise tener familia numero. No tan grande, pero la desee y no pudo ser. Ahora disfruto de los nietos de mi actual pareja y tal vez algún día de los míos propios. Un abrazote, grandote, grandote
