Alabado sea Dios,soy una señora de 62 años, hace 2 años mataron a mi hijo mayor, dejando huérfanos a 4 hijos la mayor de 18y la pequeña de 6,yo también reclamé a Dios ese actuar de su soberanía, pero en poco tiempo el me hizo reflexionar y agradecer por los que quedaron, ahora vivo para seguir dando testimonio de fé y fuerza de voluntad para muchas más personas que están como yo al principio, gracias por tan excelente audición.