Amen hermano gracias por esta palabra. Esta cuarentena me ha llamado Dios. A guardar hasta las 2 o 3 de la madrugada el enemigo ataca. Mis hijas. Pero Dios con migo. Defendiendo mi famila
Hermosa reflexión, me recuerda el día que predicó sobre este tema en un evento el año pasado en Armenia y el Espíritu Santo se derramó de una manera sobre natural. Gratos recuerdos Ministro, Dios lo siga usando poderosamente.