Salmo Responsorial Salmo 18
Los mandamientos del Señor
alegran el corazón.
La ley del Señor
es perfecta del todo
y reconforta el alma;
inmutables son
las palabras del Señor
y hacen sabio al sencillo.
Los mandamientos del Señor
alegran el corazón.
La voluntad de Dios es santa
y para siempre estable;
los mandamientos del Señor
son verdaderos
y enteramente justos.
Los mandamientos del Señor
alegran el corazón.
Aunque tu servidor
se esmera
en cumplir tus preceptos
con cuidado,
¿quién no falta, Señor,
sin advertirlo?
Perdona mis errores
ignorados.
Los mandamientos del Señor
alegran el corazón.
Presérvame, Señor,
de la soberbia,
no dejes que el orgullo
me domine;
así, del gran pecado
tu servidor podrá
encontrarse libre.
Los mandamientos del Señor
alegran el corazón.
9 окт 2024