Conocimos a Silvia Gil el pasado mes de septiembre, cuando le entregaron un premio. Enfundada en su impecable uniforme, con el tricornio bajo el brazo, cruzó el patio que conduce al salón de actos del CSIC con determinación y paso firme. Se emocionó cuando subió a recoger el galardón, ante el intenso y cálido aplauso de todo el auditorio. Y defendió, convencida, la presencia de mujeres en un cuerpo en el que apenas hay un 7% de representación femenina.
16 сен 2024