Marina Yers lo ha vuelto a hacer, pero esta vez me he enterado antes por mensajes privados que por twitter.
Me habéis preguntado mi opinión y, aunque creo que es obvia, yo no voy a decir: ok Marina, hazlo por favor. Porque esto va más allá.
Ante una noticia así en la que lo primero que te atrapa es el miedo y la incertidumbre, estamos más vulnerables que nunca.
Ponte en la situación. Te diagnostican de cáncer y por una parte un médico te dice que te va a poner tratamientos muy fuertes, que vas a sufrir y que ni siquiera tienes la certeza de que vas a sobrevivir. De otro lado, tienes a personas que te dicen totalmente convencidos de que solo comiendo unas plantas y frutas concretas te vas a curar.
En ese momento no quieres pensar, quieres dejarte guiar y lo haces con la persona que te da más confianza y con quién te da las promesas que más te gustan.
Sufrir y no saber qué ocurrirá VS tomar plantas y curarte. Además, ésta segunda suele ir acompañada de un grupo de personas espirituales que te acompaña, lo cual le suma en este momento tan sensible.
El problema no está en que Marina tenga este pensamiento y sea tan irresponsable de compartirlo, el problema está en que quizá necesitamos una mejor educación ante la enfermedad, un mayor acompañamiento y una mayor visibilidad y apoyo a los avances científicos
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14 июл 2022
