Hoy entrevisto a David Saavedra acerca de su libro “Memorias de un exnazi”. El libro relata, en primera persona, la experiencia del autor en el interior de la burbuja nazi y cómo consiguió salir de ella. Un testimonio único y revelador extensible a todo proceso de radicalización.
Hoy día David, además de seguir trabajando en las fuerzas armadas, se dedica a divulgar y hacer llegar su mensaje, principalmente a adolescentes. Esta labor me parece de vital importancia ya que puede salvarle la vida y evitarle cometer los mismos errores.
Ha sufrido amenazas de muerte por parte de personas radicales por publicar su libro y salir en televisión transmitiendo este mensaje, acusado de “traidor”.
Ha sido “atacado a machete” en sus inicios como divulgador por medios de comunicación, en especial en un conocido programa de entrevistas de La Sexta “Salvados”, donde no se le trató con la dignidad y el respeto que merece.
Al final, desradicalizarse es un acto durísimo, donde tocas fondo, tu entorno te repudia pero tampoco sabes a dónde ir… aquí empieza un camino donde primero hay un dolor emocional indescriptible, alcohol, soledad, miedo, rechazo y vacío… para poco a poco empezar una nueva etapa, apoyada por terapia psicológica que le cambió la vida, de autoconocimiento y creación de un nuevo YO en el que David aun se encuentra inmerso.
Todos somos vulnerables de ser manipulados por ideologías, de hecho el terraplanismo o creencias sobre “conspiraciones” son constantes a pesar de vivir en la era de la información. NO es de “unos pocos catetos”, todos somos vulnerables, ojo.
Conocer y saber te hacer fuerte, no te pierdas este apasionante episodio, el más largo a día de hoy del podcast, pero merece cada segundo.
Gracias David por tu tiempo, disposición y valentía… y recuerda: tú no eres, tú te comportas y mereces ser feliz.
TEXTO DEL LIBRO:
«Admiré la Alemania que creó Adolf Hitler. Me rapé el pelo al cero y adopté la estética skinhead. Me tatué la espalda con un enorme retrato de Rudolf Hess, lugarteniente del Führer. Contribuí a crear diversos grupos NS, nacionalsocialistas. Me preparé físicamente para la batalla, participando en entrenamientos físicos extremos en la sierra de Madrid. Igual de rápido que ascendí hasta la cima de la organización, me despeñé por un precipicio que me situó a las puertas del terrorismo. Un día empecé a dudar. Inicié un proceso que arrasó mi identidad. El alcoholismo y el cañón de una pistola metido en la boca fueron la señal de que había tocado fondo.
Si hace diez años me hubieran dicho que acabaría escribiendo este libro, sin lugar a dudas me habría arrojado de un puente para evitarlo. Decir que pasé dos décadas en la ultraderecha no reflejaría lo que viví. Fue mucho más que asumir una ideología.
Disfrazado de ideología política, el fanatismo amenaza con volver a irrumpir en nuestra sociedad. Es posible detenerlo.»
6 апр 2022
