A América llegó la verdadera historia morisca española, cuyas raíces provienen del desierto de Arabia. Los moro-andaluces trajeron a Chile los documentos de arcaicas culturas y nos pusieron de actualidad todo el arte mágico de los arenales.
Chile es el último lugar del mundo donde se preservó el Canto Al-lāh Daira (o Canto a la Rueda), arte mayor que une al ser humano con el Universo a través del cante, relacionado con el jondo, pero donde están unidas la copla y la siguiriya como un solo canto, encerrando melodías variadas y complejas, en la estructura y en el sistema matemático, que da la suma perfecta del compás de 6x8. El canto a la rueda dio origen a la Chilena o Cueca Tradicional en el Barrio de La Chimba, ubicado en la ribera norte del Río Mapocho en Santiago de Chile.
Esta cueca, la "Chilena", fue prohibida y poca gente lo sabe.
Los Chinganeros venimos de esa cultura, con ancestros que formaron parte de las galleras de José Miguel Carrera, luchando por la primera Independencia de Chile. Cuando los Carrera fueron expatriados por la logia Lautaro, muchos patriotas fueron enviados al archipiélago Juan Fernández, como castigo para "apagar su sed de independencia". Entre estos valientes hombres hubo un ancestro de Fernando González Marabolí, que junto a otros patriotas logró volver a continente gracias al rescate ordenado por don Diego Portales Palazuelos. Al regresar se asentaron en lo que hoy es el Barrio Franklin, donde se fundó una década más tarde el Matadero de Santiago. Este género musical, protegido por los Barrios Populares, se llamó " La cueca centrina", que los sellos grabadores bautizaron como "La Cueca Brava"... clandestina por más de 130 años.
20 авг 2020
