Inolvidable, conmovedor. Me acuerdo que se me cayó un lagrimon cuando Yana dejó el alma en su ultimo ejercicio en Rio, luego de la caida de una maza. Y Margarita sabiendose campeona llorisqueaba de alegria y de pena, porque sabía que a pesar de ser muy buena y tener el oro asegurado, en el corazón de todos Yana era la verdadera campeona.
Sin duda, Mamun nunca supero a Yana, sabe de sobra que sin ese error nunca podria ganarle, la cuestion es que Yana tuvo ese fallo y los fallos en el codigo anterior creo que se castigaban mas. Con el codigo actual una caida no te condena de ese modo.
@@Ramsesos Bueno, es una norma distinta, una pena es que Yana no ganase por eso, y tambien las Averina, en los momentos clave, no suelen tener caidas, pero si las tienen, no se penaliza tanto.
Yana es sin duda la reina de la pelota, nadie ha ofrecido unos ejercicios tan hermosos como ella con este aparato. Era una gimnasia especial, perfeccionista, cuidando cada detalle y con un manejo de aparato y limpieza corporal espectacular. Fue entrenada por la gran Elena Karpushenko, que le da a sus gimnastas esos agarres con la pelota tan particulares y dificultosos.
Esta chica tiene 16 recien cumplidos.. Que hara Ella cuanto llegue a su madurez ? Es sencillamente fuera de serie.. Es lo mejor en decadas en la ritmica mundial !!!
Siempre pienso que Kanaeva es la mejor de la historia, tiene 2 oros olimpicos y record de mundiales y europeos, luego piensa en las gemelas Averina y son una pasada, las amo, pero Yana es algo unico, diferente, no se puede comparar.
Me dan ganas de llorar, pero llore mucho cuando Margarita Mamun ganó el Oro en Río, mientras su padre moría de cáncer en Rusia, e Irina Viner no la dejo ir a ver a su padre....también triste ver a Yana Kudriatseva verle caer la maza y perder el oro.
bárbara!!! dios por favor que la Viner no vuelva a cometer el terrible error de obstinarse con una gimnasta (Mamun) como lo hizo cuando prefirió a kapranova por sobre Sessina
Yana y Margarita, cada una perfecta a su manera y trabajaron muy duro...las rutinas de ambas eran superiores, te contaban una historia. Margarita merecía esa medalla, no cometió errores.