El mundo no es mi hogar, soy peregrino aquí;
En la ciudad de luz tendré tesoros, sí.
Eterno resplandor por siempre gozaré,
Y la vida mundana jamás desearé.
CORO
Bendito Cristo, Tú eres siempre fiel,
La dicha que me das más dulce es que la miel,
La célica mansión por siempre gozaré,
Y la vida mundana jamás desearé.
Un himno entonaré a Cristo el Salvador,
«Digno eres, oh Señor, de gloria y honor.»
La patria celestial por siempre gozaré,
Y la vida mundana jamás desearé.
Ningún dolor habrá al lado de Jesús,
Quien derramó su sangre en la cruenta cruz.
Perfecta paz allá por siempre gozaré,
Y la vida mundana jamás desearé.
24 сен 2024