Al ser informado sobre el suceso y la muerte de tantos alemanes, Hitler montó en cólera y el ministro alemán de Asuntos Exteriores necesitó seis horas para tratar de calmarle. Debido a la excitación, Hitler ordenó el bombardeo de Valencia (sede del gobierno) como contrapartida por este ataque; Tras ser aconsejado por sus asesores militares, decidió el bombardeo de Almería, al ser una ciudad sin defensas militares de importancia así como para evitar un gran eco internacional.
19 muertos, 55 heridos y 35 edificios destruidos.
Otra información es ... En cuanto a víctimas y aunque diversas fuentes varían su número, podemos cifrar el número de muertos en treinta y uno, mientras que el de heridos resulta incalculable.
6 июн 2011