En los tiempos de prosperidad del puerto de Valparaíso en lo que algunos llaman "la edad dorada" mucho viajeros extranjeros llegaban al principal puerto del pacifico, luego de un largo viaje desde el Cabo de Hornos. El cansancio y los pesares del viaje obligaban a acudir en busca de un buen y cómodo lugar de hospedaje, por lo que la ciudad se vio obligada a disponer de numerosos hoteles para así atender a las necesidades y lujos de quienes llegaban Valparaíso.
Aquí una reseña de algunos de estos hoteles que hace casi un siglo llenaban el puerto de lujos, comodidades y como no mencionarlo, buena cocina.
Hotel Aubry: Comenzando sus actividades en 1830 bajo la dirección de Mme Aubrit, poco a poco deja de ser la posada que era en un inicio para convertirse en el mas emblemático hotel de la primera mitad del siglo XIX. Para el año 1862 contaba con comedores para 300 personas además de diez habitaciones para familias y cincuenta y cuatro habitaciones. Desafortunadamente en 1882 este hotel fue destruido completamente por un incendio.
Hotel Colon: Comenzando sus actividades en 1864, este hotel contaba con una gran sala de banquetes, comedor con vista al mar y escaleras de mármol. Cabe destacar que por este hotel paso la celebridad de la época Sarah Bernhardt quien no tuvo un cálido recibimiento por parte del publico chileno, ya que fue recibida con un exiguo aplauso claramente esto fue una ofensa para ella por lo cual se retiro indignada argumentando que éramos una manga de brutos.
Para el año 1910 el hotel contaba con una capacidad para sesenta pasajeros, además de luz eléctrica. Para los años cincuenta operaba como residencial y así se extinguió junto con otros hoteles que brillaron en la edad dorada de Valparaíso.
El edificio del que fuera otrora un lujoso hotel ahora alberga en su interior algunas oficinas pero aun se siente en sus pasillos el olor del lujo y refinamiento de hace un siglo.
Hotel Royal: El más grande y lujoso de los hoteles de aquella época, desde su inicio ocupó una importante posición entre los mas grandes hoteles de Chile. El edificio que ocupaba el hotel fue proyectado con tres pisos mas un nivel de mansardas.
El inicio de sus actividades esta registrado para el año 1897, dotado de cómodos recintos públicos y privados de recepción, además de salas de baño con lujos gritería, ascensores, peluquería, salón de billares, además de una reputada cocina y buena calefacción. Se realizaba Dinner-Concert dos veces por semana y tenia una capacidad para 300 pasajeros.
A través de los años el prestigio del hotel fue tal que fue categorizado como el mejor des la costa del Pacífico Sur, lo que atrajo a ilustres invitados además de lujosas fiestas como el gran baile de dala de la Colonia Norteamericana para conmemorar el 4 de julio.
En 1910 año del centenario el hotel ofrecía sus conocidas sopas de tortugas de Galápagos.
Los años fueron corriendo y todo el lujo y ostentación de antaño fueron quedando atrás, fue así como ya para el año 1945 el hotel entro en decadencia para años mas tarde cerrar definitivamente sus puertas, cerrando así el capitulo del romanticismo y el glamour que alguna vez vivió este puerto.
Hotel Lebell: Se establece supuestamente a finales de la década de 1910. Fue catalogado como hotel de primera categoría. Emplazado en un cómodo edificio de moderna arquitectura y de tres pisos, al cual posteriormente se le agrego un cuarto nivel de bajo perfil donde funcionó un bar-terraza el hotel contaba además con 120 camas.
En la década de los treinta contaba con cuarenta y cuatro habitaciones para dos o mas personas, mas treinta y ocho baños. En los cuarenta todas sus habitaciones tenían teléfono y baño y en los cincuenta había aumentado a sesenta y dos habitaciones.
A mediados de los setenta un incendio afecto al hotel, que luego de este suceso no pudo recuperarse cerrando definitivamente sus puertas.
El acompañamiento musical es del gran pianista chileno Armando Carrera interpretando una selcción de fox-trot.
12 май 2011
