Al príncipe Harry y Meghan Markle se les pidió que abandonaran Frogmore Cottage en marzo pasado, pero el drama en torno a la residencia real continúa.
Los Sussex recibieron la propiedad como regalo de bodas de la difunta reina Isabel e hicieron suya la casa histórica de cuatro dormitorios con una renovación de 2,4 millones de libras. Se mudaron durante 2019 y se quedaron hasta que anunciaron su decisión de renunciar a la Familia Real en 2020. El rey Carlos les pidió que entregaran las llaves el año pasado.
27 июн 2024