Zapatillas rojas, camisa abierta, sin corbata, luce desprolija y salida de la cintura, saco abierto, parece que va a bailar la jota en una feria, donde quedo la sobriedad, la elegancia, la clase y el estilo que fue y es el sello de un bailarín de tango, que no sacude a su pareja ni la lleva a los empujones apoyando sus pasos para destacar y sacar provechos del lucimiento de su excelente compañera quien es la que le da brillo, y que el desmerece con su indumentaria no solo la elegancia de su pareja, sino la esencia misma del tango, en su afán de imitar a Chico Frumboli. Es mi modesta opinión, sin tratar de desmerecer a nadie, pero el tango es un baile que es técnica, pero también es elegancia que trasmite una emoción que en su conjunto va más allá de los bailarines y eso es lo que hace al tango único.
A mi gusto, se ve tironeado, algunos movimientos muy "rudos". La ropa no me molesta solo veo que no armonizan. Gustos. Aunque por los aplausos el publico esta conforme y no me extraña , muchos creen que bailar tango es hacer piruetas y revolear la compañera.