Soy yo quien recuerda Quito como una ciudad llena de panaderías, casi en cada esquina, sin hacerle falta al pan de cada día. En Madrid, suele ser difícil encontrar una que te transporte a las mañanas cuando tomaba café y cachitos o empanadas de queso y té. Mi interés por este establecimiento y su historia solo se pueden ver como una reflexión acerca que tan cerca podemos tener lo que nos hace feliz,lo que nos hace vivir, su gente, sus productos, sus anécdotas, sus historias. De como hemos cruzado océanos con ideas y personas para salir adelante, para seguir siendo esa esencia tan característica, tan quiteña, tan ecuatoriana, en cualquier parte del mundo, esta vez, en Madrid.
Agradecer, por último, pero no menos importante, a la protagonista de este chulla documental, de mi seño Oderay; persona, madre y creyente en su fé, por prestarse y por dar más de lo que ustedes pueden ver en pantalla, a sus hijos, a su vida, de corazón.
💛 / insxander
9 мар 2022
