un singular concurso de Soldados Palla Pallas donde al son de la zampoña se comienza a bailar en las orillas del legendario Titicaca, distrito de Unicachi (Yunguyo).
Llama la curiosidad la vestimenta de sus componentes: todos tienen atuendo militar o de policía, ya sea del Ejército, la Marina, Policía Nacional, Guardia Republicana o Policía Militar, ya que ellos sirvieron a estas instituciones cumpliendo el Servicio Militar Obligatorio.
La ropa varía de acuerdo a los participantes, desde abuelos hasta niños, indiscutiblemente los de más viejos usan la vestimenta de su tiempo, mientras que los más jóvenes lo hacen con el uniforme de los actuales soldados o de algunas ramas del Ejército.
Como refieren los lugareños, esta danza simboliza a los “reclutados” "recogidos" o "levados" para desarrollar distinto tipo de actividad militar. Para empezar con el evento el alcalde Simón Avendaño Yapuchura dio la bienvenida a sus similares alcaldes de los distritos de Copani, Cuturapi, Tinicachi, y al consejero de la provincia y a la población asistente.
Su tradición empieza con la necesidad de contar con tropas por parte de los gobernantes de entonces, hacía que varones entre los 16 y 25 años fueran reclutados para desarrollar el arte de la guerra en distintos lugares, para ampliar su territorio o para sofocar rebeliones locales.
Al retornar a su lugar de origen, los "licenciados" reproducen parte de su experiencia, satirizándola.
La asistencia de cada conjunto tiene un rol compartido, primeramente ingresa a paso de carrera el jefe de la "tropa de Palla Pallas", arreglado de acuerdo a su rango, la mayoría de ellos porta un sable antiguo, y haciendo los debidos gestos militares y en voz resonante anuncia la participación de su conjunto ante el alcalde y solicita permiso respectivo para su presentación.
2 окт 2024