LO PRIMERO QUE HUBIERA REALIZADO ES PEDIR AUTORIZACIÓN A LA SUPERIORIDAD, DE NO TENERLA HUBIERA SIDO MENOR LAS CONSECUENCIAS PARA SU PERSONA, HUBIERA HECHO DE MANERA DISCRETA UNA COLECTA CON SUS COLEGAS.
El video que muestras al comienzo es de una cruda realidad. Al hacer un trámite en una institución del Estado pareciera que estamos tratando con enemigos. He sentido el regocijo del funcionario que trata despectivamente a personas humildes y que siente satisfacción ante la desesperación de la gente que llega a sus oficinas. Hay gente encomiable también por supuesto, pero debemos quitar esa percepción que tiene el ciudadano ante sus instituciones públicas. Eso abona en detrimento del Estado y se refuerza el concepto de que todo lo público es malo. No lo permitamos.
