Atención: este es un video casi sin edición (estilo podcast) en el que te cuento sobre el estado actual del mercado literario y las opciones que existen para publicar tu libro. Los links a los que aludo en el video: www.infobae.com/2005/10/18/217064-el-premio-planeta-espana-termino-un-escandalo/ www.proceso.com.mx/194211/el-escandalo-de-planeta-argentina-nielsen-gana-a-piglia patrulladesalvacion.com/2015/03/04/la-biografia-de-juan-marse-desvela-la-trama-de-los-premios-planeta/ www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/radar/9-2094-2005-03-13.html
Acabo de descubrir tu canal justo en el momento en que estoy intentando escribir historias que hace tiempo tengo en mi cabeza. Me parece buenísimo el contenido y me sirve de mucho. Gracias!
Séptimo: me acordé, mientras escuchaba este podcast, que hace algunos años se realizó este experimento: enviaron a editoriales grandes novelas menores de autores consagrados como Nabokov, Gidé e incluso algo de Kafka. A todos los rechazaron. Resulta inaudito que los encargados de recibir y filtrar los textos que reciben las editoriales no hayan reconocido la prosa y el estilo de esos escritores.
Muy bueno, Alejandro, muchas gracias por tus sugerencias. En lo que a mí respecta, publicar mi primer (y, hasta ahora, único) libro de cuentos, fue un proceso que llevó siete largos años. Resumo esos siete años: 1) A mediados de 2011 recomencé a escribir después de casi nueve años sin hacerlo, a través de un taller literario online, comunitario y gratuito, con una pujanza impresionante de escritores similares a uno, todos noveles e intentando aprender en conjunto. 2) A fines de 2015, luego de cuatro años y medio de ejercicios literarios en ese taller, y de estudiar todo lo que pude a través de la web (en mi pequeña ciudad no se dictan talleres por el estilo, sino más bien de lectura), consideré que podría iniciarme en el desafío de intentar publicar algo de mi obra. 3) Fue allí donde me contacté con tu colega Analía Pinto, quien corrigió veintiséis de mis cuentos (todos con un tinte sobrenatural), y seleccionó trece de ellos para publicar en una hipotética antología. 4) Después de que Analía finalizó con su tarea, yo, a su vez, trabajé sobre el laburo de ella y me enfoqué en lo que implicaba el armado de una antología en particular (el orden de los cuentos, el nombre de la antología, eliminación o cambio de las mismas palabras usadas en distintos cuentos, y demás). Eso me llevó cerca de un año más (mientras, seguía escribiendo y, además, laburando en mi profesión, ja: la familia tiene que comer). 5) A principios de 2017 me presenté con la antología en un concurso sobre el género de terror, organizado por una pequeña editorial de Buenos Aires especialista en el tema. En octubre de ese año, me enteré que, entre cincuenta y tres participantes, ¡era uno de los finalistas! No lo podía creer. 6) En diciembre de 2017 se conocieron los resultados del concurso, del cual resultó ganador uno de los amigos que me regaló la literatura: el escritor platense Sebastián Elesgaray, con su novela «Los días de Nicolás» (la recontrarecomiendo). 7) El hecho de haber llegado a una final en mi primera participación en un concurso de ese tipo, fue un aliciente y me dio el empujoncito final para darme cuenta que, en principio, la antología podía ser una obra que el público al que le gusta el terror, el suspenso, lo sobrenatural, podía llegar a disfrutar. 8) En febrero de 2018 registré la obra en la Dirección de la Propiedad de los Derechos de Autor, con un trámite online relativamente sencillo. 9) A partir de ahí, seleccioné por internet distintas editoriales (todas de carácter mediano o chico, nunca grade), que podrían llegar a publicar una antología de cuentos (no todas lo hacen) con la temática señalada (menos lo hacen acá). 10) Debo haber mandado unos veinticinco, treinta mails a las mismas, donde manifestaba que tenia una obra posible de ser publicada, con aquel antecedente de ser finalista en un concurso de género terrorífico. A ninguna le adjunté la obra, sino que les manifesté que, si era de su interés, se la adjuntaba en un mail adicional. 11) Tuve respuesta de cinco o seis solicitando la obra, y de otras cuatro o cinco que me dijeron que el presupuesto anual de publicación estaba cubierto. 12) De esas cinco o seis que contestaron, cuatro de ellas me pasaron un presupuesto para realizar una autopublicación. 13) Finalmente, me decanté por una editorial pequeña especialista en terror, también de Buenos Aires, y empecé a trabajar con el editor. Fu una experiencia muy gratificante, ya que no solo pudimos avanzar en conjunto en portada, maquetación, ilustraciones y demás, sin que, sobre todo, pudimos discutir cuestiones propias de corrección y edición del texto, apuntando en conjunto a mejorarlo aún más. 14) En julio de 2018, siete años después de haber recomenzado a escribir (como conté más arriba), «Truculencias», mi primer libro de cuentos, vio la luz. ¿Autopublicación? Sí, pero buscando una editorial que se pusiera las pilas no solo con la gestión de impresión de los ejemplares, sino, y sobre todo, con la preparación final del producto (texto en general,texto en particular, portada, maquetación, ISBN, gestión en general...). La distribución es todo un tema, porque corre por mi cuenta. No es fácil, pero ahí vamos, capeando el temporal (justo se me ocurre publicar en uno de los años más complicados, en lo económico, que se recuerde últimamente). Junto a la editorial estamos trabajando con una distribuidora, que abre algunas puertas adicionales, pero que tiene un costo que cubro exclusivamente yo... Y después está el tema de las presentaciones del libro, una oportunidad importante para poder lograr que más gente conozca tus letras. Entiendo que no es fácil la autopublicación, porque, además de que hay que tener la suficiente humildad para saber que uno no es Borges ni Stephen King (necesitamos la ayuda de un profesional externo en corrección que mejore nuestra obra, y así lograr en conjunto un buen producto de lectura), ella implica una inversión en dinero que es importante, y que uno no sabe si podrá recuperar (más allá de que uno siempre quiere que más gente lo lea, si la cuenta sale equilibrada y no se pierde dinero, mejor). En mi caso en particular, recién haré un balance de acá a un año, año y medio, más o menos, cuando el tren que lleva «Truculencias» a bordo haya pasado por todas sus estaciones posibles... Y ahí veremos cómo me fue. Abrazo, Alejandro P.D.: Y perdón por el comentario tan extenso; pero es un tema que me apasiona, y no lo puedo evitar. Ojalá que mi experiencia le pueda servir a alguien. No hay que desesperarse por publicar: eso lo tengo clarísimo.
¡Muchas gracias por tu aporte, Juan! Nada de pedir perdón, al contrario, es muy bueno contar con experiencias concretas aquí. Y sí, lo que vos describís es lo que yo intenté explicar en el video: autopublicar, si uno respeta a los lectores y a su propia obra, no es cuestión de garabatear unos textos y mandarlos a una imprenta disfrazada de editorial, sino algo más complejo pero que, al final, nos dará muchas más satisfacciones. Te mando un abrazo.
Muchas gracias por el vídeo. La verdad, la cuestión de la autopublicación, o publicar a través de Amazon me generaba muchas reticencias, sobre todo porque siento -o sentía- que no me estaba ganando el derecho de mostrar a los demás lo que escribo (incluso me cuesta llamarle trabajo a mis escritos), pero luego de ver tu vídeo comienzo a pensar que no es tan mala idea. Yo siempre pensaba que ese derecho, el de mostrar a los demás lo que escribo, de que tenga o pudiera tener cierto tipo de relevancia, solo podía ganarse si obtenía algún premio en un concurso relevante, o en su defecto, si alguna editorial más o menos grande los aprobaba. Pero luego de escuchar tu podcast, comienzo a pensar que no es tan así, los concursos tienen cierto tipo de amaño: hay que ser políticamente correcto, es en cierta medida una cuestión de suerte, y algunos son premios casi anónimos; y por otro lado, las editoriales te exigen, de una u otra manera, un público cautivo, aunque no te lo dicen. Recuerdo, respecto a esto último, que hace algunos años, envié a una editorial reconocida un manuscrito vía web, y acompañado del manuscrito debía presentar un formulario, y en el formulario preguntaban descaradamente si tenía acceso a algún medio de comunicación, si era una persona pública, o si era profesor de literatura en ejercicio, y cuántos alumnos tenía (de resultar afirmativa la respuesta); eso sencillamente me desmoronó, porque ya iba viendo hacia donde apuntaban las editoriales. Pero luego de escuchar tus opiniones, creo que desempolvaré mis cuentos, e intentaré publicar por Amazon, al menos para darme el gusto. Gracias por el vídeo. Saludos.
Tercero: en su ensayo "Un ejercicio de esgrima" Guillermo Martinez toca este asunto espinoso de la publicación. De acuerdo con Martinez en este país hay tres caminos que garantizan la publicación de un libro: *trabajar en algún medio cultural, por ejemplo: un suplemento literario de algún periódico de gran tirada. *ser editor *ser amigo de un editor.
Hola, Alejandro. Este es un vídeo que escuhé dos veces porque me interesa y es muy acertado lo que decís respecto de las imprentas, digase bien: IMPRENTA, que imprimen cualquier texto que se les acerque. Lo cual no me parece mal, desde el punto de vista de la imprenta sólo hacen su trabajo que es imprimirlo y darle formato de libro. Y por otro lado, la necesidad del autor que recurre a ellas. Que es mi caso. Lo hice para poder acercar a un círuclo muy chico de personas allegadas a mi que me lo han comprado a travéz de un crowfoundig, un círculo muy pequeño de personas que me dieron una mano para que yo imprimiera el libro. Creo que vale ser conciente de que uno, recurriendo a una imprenta, no se garantiza una difusión ni llegada a un público por fuera de su círculo personal y conocido. Te mando un abrazo, es muy interesante tu canal.
Nunca gané ningún concurso pero algunos de mis cuentos ahora son leyendas urbanas, admito que de casualidad. Nunca le di mayor importancia, pero me lo tomé como un cierto reconocimiento.
Borges decía que el mejor destino de un cuento es volverse anónimo, que se cuente como si fuera de todos y de nadie. Y sí, eso vale más que cualquier premio.
Me resultó muy interesante la información. También un poco deprimente. Estoy cansada de guardar lo que escribo en un cajón. Es necesario ser leída, más allá de un taller. Ahí se completa el sentido de la escritura.
1°_ Sólo se escucharon dos ruidos (ambulancias) en tooodo el audio... ¡no e' pa'tanto, don profe! 2°_ Fuiste muy claro y la información que nos diste me resultó utilísima. 3°_ Sí, por favor: hacé todos los videos que quieras sobre estos temas. Son la parte "terrenal" de la literatura y normalmente, uno no sabe o no tiene a quién consultar sobre ella. 4°_ Coincido al 100% con tus opiniones respecto a las cuestiones tratadas en este audio. 5°_ Soy argentina, pero resido en España desde hace un montón de años. Puedo asegurarte, por experiencia propia y de amigos, que todo lo que explicás en relación a la publicación, los concursos, el negocio editorial, etc. en la Argentina... ¡es desgraciadamente idéntico a lo que sucede en España! 6°_ Y ya por último, buscaré en mis más que despelotados archivos y te reenviaré un correo que me mandaron de Amazon hace tan sólo unos días, con una oferta de publicación que me pareció muy completa y que me gustaría que valoraras. Yo también era -y creo que, en el fondo sigo siendo- muy reacia a la autopublicación (sobre todo, la electrónica); pero viendo el panorama mundial, me lo estoy replanteando. Bueno, cuando recibas mi información, espero que me des tu parecer. Creo que puede ser útil para todos... Un abrazo y ¡muchísimas gracias, Alejandro!
¡Hombre! Alejandro, gracias por tus videos (o como los llames) Te sigo desde Colombia y me gusta esa honestidad tuya que en ocasiones parece cruel. Sólo es la verdad.
Ale: Este es el video que estuve esperando desde mi adolescencia. Muy bueno todo lo que comentás. Se me hizo muy breve (confieso que al ver que duraba media hora medio que dudé) y me quedé con ganas de más. Espero que hagas otro de este estilo y que desarrolles los puntos que quedaron sin tratar, los de los concursos por ejemplo. Abrazo.
He publicado 2 libros en Chile yo y el primero fue en inglés, 1.000 ejemplares y pude contactarme con librerias en EEUU y Manila, así que me doy cuenta que fue una buena experiencia porque recibí ayuda de mucha gente para promocionarlo aunque la distribución fue un dolor de cabeza. El segundo libro publiqué 300 ejemplares (en español) y la editorial chilena me trató sin ética. Regalé todos y compré más. Igual han ayudado mi perfil. Ahora escribo una novela (los otros 2 eran no ficción) y no pienso autopublicar, voy a tocar puertas aunque demore 10 años. Igual tiene sus costos (yo entrego libros super pulcros, corregidos, llave en mano). "En este cerro moriré yo".
Muy bueno la verdad, este formato tipo podcast en crudo me gusta. Respecto a uno de los temas en particular, el de la publicación tradicional, no seria tan apocalíptico (aunque obviamente es la forma mas difícil de publicar) en ese respecto, al menos en lo que seria ficción literaria. el boom actual que hay de editoriales ''independientes'' al menos acá en Argentina es algo que da esperanzas. Primero porque ya es casi un mercado que actúa en paralelo con las grandes multinacionales y en donde se publican las obras ''serias'' de escritores jóvenes actualmente y es un nicho legitimado y segundo por el amplio rango de estilos y enfoques que proponen esas editoriales. Eterna Cadencia, Interzona, Mardulce, Entropía, Sigilo, las editoriales de ''La coop'' y muchas mas son lugares donde esta lo mejor de la ficción literaria nacional, y muchas funcionan con el sistema de mandar manuscritos. Nada, eso solo quería aportar, desde mi humilde lugar de no-escritor (Ya que está adjunto este articulo del blog de Eterna Cadencia, blog que super recomiendo) www.eternacadencia.com.ar/blog/contenidos-originales/entrevistas/item/del-doc-al-libro.html
Gracias, Cristian. Sí, debí hacer un poco más de énfasis en lo de las editoriales chicas. Hoy parece que sólo existen esa literatura "seria" (con muchas comillas, porque en todos lados hay de todo) y de nicho, o el océano insondable de Amazon. Por fortuna, y como ya dije en el intento de podcast, no son alternativas excluyentes.
Gracias por aclarar lo de los " estadounidenses " . No lo había pensado. Es interesante ya que creo que la mayoría no reflexiona sobre las definiciones " norteamericano/a y " americano/a.
Por algún motivo estoy volviendo a ver esto y es cierto. No voy a decir nombres, pero por experiencia, con esto de las convocatorias existe mucho "amiguismo" de por medio. Sobre los que te piden plata, acá en México tenemos como ejemplo a Porrúa.
Hola! Muy buenos consejos, se agradece la sinceridad y la orientación en el tema, escucharlo es como si uno habla con un amigo. Felicitaciones maestro!! Francisco bugueño, autor de la novela Los violines de Allende. Antofagasta, Chile. Un abrazo!!
Extraordinaria reseña del negocio literario. Agregaría sólo una cuestión en cuanto a los actuales concursos literarios: existe una severa discriminación ideológica que roza la censura: el 99% de los concursos están destinados a mujeres, homosexuales, y personas de izquierda. Todos los demás quedamos afuera. El monotema es grotesco. Por mi parte, casi he desistido de presentarme a ninguno. Excelente video como siempre. ¡Saludos!
Sexto: respecto a los certámenes organizados por las editoriales importantes, hay por lo menos dos ganadores del Premio Clarín de novela que tenían alguna relación con el medio cultural o algún tipo de cuña, lo cual no quita mérito a sus cualidades literarias, faltaría más.
Gracias por los videos, retomé mi sueño de escribir en pleno fin de los tiempos, por suerte encontré tu canal en un momento de mi vida en que me di cuenta de que mis ideas pueden ser buenas pero escribo como bestia. Saludos desde Uruguay.
Cuarto: por una cuestión supongo yo generacional, a Martinez se le escapó otra alternativa: ser un youtuber con una buena base de seguidores. Fijate el caso de Dross: el tipo tiene, qué sé yo, 14 millones de subs; cualquier editorial estaría dispuesta a publicarle un libro, ya que tiene las ventas aseguradas.
Alguien que habla con Dross me contó que las editoriales grandes lo sacaron rajando, al menos en un principio (pero cuando el tipo ya tenía millones de seguidores). Así que imaginate como viene la mano... Pero sí, para una editorial mediana puede ser más tentador. Aunque si yo tengo 14 palos suscritos les vendo mis libros por Amazon, y me quedo con el 70% de las regalías. No le voy a regalar ese público a una editorial que me esquilme.
Te felicito por el vídeo. Me encanto. Me gustaría que hicieras alguno sobre la publicación en Amazon, que es un tema que esta muy en boga. Tambien me encantan los podcast, así que no te cortes con este formato. Buena suerte!
Muchas gracias, Cris. Estoy involucrado en un proyecto en Amazon, y de a poco voy aprendiendo cómo manejarme. Cuando tenga las cosas más claras, seguramente haré un video al respecto. Saludos.
La otra vez leí una guía paso a paso para publicar en Amazon. Ahora no la encuentro 🤦🏻♂️. Pero uno de los puntos era el de la corrección, y otro importante el de la visualización.
Me gustó tu charla, comparto casi todo lo que dijiste y me hiciste ver varias cosas también. Actualmente existe un concurso de la feria del libro, con un premio bastante bueno, espero no sea un chantaje.
Con probar no se pierde nada, existen muchos concursos que sí son serios. Igual, más allá de las suspicacias, siempre es mejor no ir con muchas expectativas, más que nada por la salud mental de uno. Gracias por tu comentario, Eric. Saludos.
En España la autopublicación está bien vista. Pero no en editoriales sino en imprentas; uno mismo contratando sus servicios. Existen redes sociales donde los autores interactúan con lectores y, la mayoría de esos autores, ganan fama a partir de esas redes sociales. El boca a boca los lleva luego a ser publicados por editoriales convencionales.
@@Elsurtaller Eso hacen todos. Prima siempre la calidad. A mí me faltará el diseñador de portada, pero para corrector tengo al mejor: Alejandro Baravalle. No lo duden si quieren calidad de primera, escritores y escritoras.
Así es. Se puede recibir, pero tenés que pagar un 30% de impuestos y esperar el cheque que te envían cada vez que acumulás 100 dólares. Gracias por comentar. Saludos. :)
