Muchas gracias Bani por estas palabras. Acabo de perder a mi hijo y mi fe se tambaleó pero Jesús no se apartó de mi lado y me abrazo con todo su amor. Me di cuenta que Dios me dio temple y dominio propio para sobrellevar mi dolor, que no me fue dado espíritu de cobardía. En uno de los primeros días oscuros, pensé en ti y en tu canción Ciudad de colores y me reconfortó saber que mi hijo está ahí. La puse y lloré de alegría. Sabes yo estuve en Vida cantando a todo pulmón cuando grabaste ese disco y a lo largo de estos años siempre has estado presente con tus canciones y hoy tus palabras llegan de nuevo justo cuando las necesito. Dios te bendiga!!