Querida Rosita DraVirginia. Un día hace muchos años me pregunte esto.. Que quiero de mi.? Que esperó de mi? Espere de mi madre.de mi padre.de mis amigos de mis vecinos. Del párroco de mi Iglesia y hasta de mis Gobernantes. Y en mi espera an pasado tantas primaveras. Porqué nunca espere de mi? Porqué nunca me pedí ayuda.? Porqué en vez de buscar fuera.no busqué dentro de mi? Hoy después de tantos años de esperar de todo mundo. He llegado a concluir que no puedo esperar de nadie pues solo me tengo a mi..! Para Reyna de Reyna.. Nunca lo había compartido con nadie. Con mucho cariño lo comparto con ustedes que aportan tantas herramientas para seguir viviendo.infinitas gracias gracias gracias.
Un abrazo a ambas❤❤y a Melina, sufrí el desapego y fue como pasar por una puerta con mucho miedo y para mi sorpresa: he encontrado más libertad( de la genuina) hay que atreverse¡¡¡¡
Gracias Virginia por tu columna! Yo pude salir de ese lugar después de casi una vida. Uno acepta esa especie de esclavitud sin cuestionarla. Sólo la confianza en uno mismo y el saber que si no nos vamos nos morimos de tristeza , nos empuja finalmente a escapar de esa relación. Es difícil, genera mucho miedo al principio ,pero vale la pena hacerlo. Del otro lado de esa puerta hay una vida maravillosa esperándonos! Abrazo!
Gracias Virginia, Me gustaría mostrar otro aspecto del apego para observar, que no tiene que ver ni con personas ni con cosas específicamente, sino con acciones. Hace muchísimos años, me acuerdo que mi abuela decía, en un dialecto italiano, algo así como: "Haz el bien y olvídate; haz el mal y acuérdate." La segunda parte me parece más obvia, y está relacionada con lo que hoy llamaríamos generar karma. La primera parte, sin embargo es una invitación a no tener expectativas cada vez que hacemos algo bueno, o útil, o amoroso. Creo que es como decir "desapégate de los frutos de tus acciones." No te enganches del resultado.
Exacto todo tiene su polaridad…se tendría que encontrar un equilibrio…y echar para atrás las creencias que traemos ya arraigadas…me encanta escucharte Virginia 🫶🏼
Gracias, Virginia. Me separé después de años de infelicidad, insatisfacción, frustraciones, violencia subyacente y explícita de un hombre que no sabía qué hacer con su vida. Me costó tomar la decisión pero cuando lo hice, fue irrevocable a pesar de su llanto y sus pedidos de perdón. En ese momento, lo ayudé a marcharse. Literalmente, le preparé las cajas, las valijas y los muebles (ahora creo que lo hice por mi, para aliviar mi "culpa" y para asegurarme de que se fuera). Corté todo vínculo con él y la misma decisión tomaron mis hijas que estaban profundamente heridas por cómo había sido su padre con ellas. Mi hijo decidió seguir en contactos esporádicos con el padre, a los que al principio asistía a regañadientes a pesar de haberlo decidido él mismo. Creo que le sirvió de algún modo, para sanar sus propias heridas y constituir un nuevo vínculo con el padre. La muerte de mi hija menor fue otro terremoto para todos. Yo sigo trabajando en esa terrible pérdida y en ese proceso, fue que te conocí pues mi terapeuta se inscribe en la psicología transpersonal. Veo tus videos y me ayudan a reconstruirme. El de hoy, me dio la pauta de que mi proceder no estuvo desacertado. Cuando, mi ex marido enfermó de gravedad, decidí asistirlo porque no tenía familiares cercanos que lo hicieran, hasta que mi hijo regresó desde otra ciudad. Finalmente, él falleció pero me alivia haber estado ahí, acompañando a mi hijo, en esa despedida del padre. Y aunque los malos recuerdos a veces vuelven, trato de que no se apoderen de mi vida y quizás lo que siento es algo parecido al perdón. Lo que pasó ya no se puede cambiar. Sólo trato de aprender a cuidar de mi porque siempre estuve abocada al cuidado de otros y a aprender a vivir sola, sin pareja. Gracias por tu sabiduría, tu dulzura. Y disculpas por tan largo comentario.
Un tema muy intetesante. Mi marido tiene un apego hacia mi, sufre cada vez que me alejo, se estresa, se enoja, y en su afan de "protegerme" quiere llevarme y traerme a todos lados. Me asfixia, pero entiendo que yo lo permiti, primero para que no se enojara y luego caí en mi zona de confort. Ahora soy consciente y cada vez le pongo mas limites. El problema es que no acepta recibir terapia! Gracias
Tuve una relación, la primera. El acababa de perder a su madre, yo hacía 2 años que había perdido a mi padre y a mi abuela. El principio fue hermoso, luego se transformó en una lapa, que no me dejaba respirar y a quien todo le molestaba. No podía estudiar, ni salir con amigas, controlaba si hablaba por teléfono. Me llevó años dejarlo. Me buscaba y lloraba diciendo que cambiaría, pero no, ya sabemos que eso no pasa. Me fui a pasar un tiempo a la otra punta del país y a los 6 o 7 meses supe que se había casado. Me sentí traicionada. ¡Había dejado tanta vida por vivir!, quedé con miedos, frustraciones, dolor. Estaba viviendo en España y creía tener todo superado, aunque nunca formé una buena pareja. Habían pasado 35 años y en mi pc. apareció un escueto correo con su nombre. Me pedía perdón por todo el daño causado y me deseaba lo mejor. Primero me alegró saber de él. Luego lloré una semana. No podía dejar de llorar. Lo había guardado tan profundo, que no sabía que todavía estaba. Creí que lo había soltado y resultó que no.
Al menos no del todo. Siempre es así: parece que del todo, pero no. Sin embargo, un día queda atrás. Ya falta poco: lo principal lo procesaste. Te abrazo!!! Virginia
Adentro, pero con ayuda. Sin ayuda, los años pasan, y estamos perdidos en el laberinto. Sólo nos puede ayudar el que nos ve desde afuera y nos puede tirar la soga de la cual tomarnos y salir. Te abrazo!
