Ubicada en pleno corazón del centro histórico de Estambul, la Cisterna Basílica data del año 532. Construida por orden del emperador Justiniano I para dotar de agua potable a Santa Sofía y Gran Palacio de Constantinopla. Posee 336 columnas distribuidas a lo largo de pasillos que parecen infinitos.
Conocido como el Palacio Sumergido esta maravilla de la ingeniería bizantina posee una superficie de casi 10.000 metros cuadrados y capacidad de 80.000 metros cúbicos de agua.
Actualmente la cisterna se transforma en un mágico mundo maravilloso, con una iluminación atmosférica que proyecta un Brillo de otro mundo en toda la estructura. La iluminación muestra maravillosamente la intrincada arquitectura y las tallas de las 336 columnas, mientras que sus reflejos en el agua crean un reflejo único creando una atmósfera mística. Dos de los principales atractivos de la Cisterna Basílica: la cabeza de Medusa y la Columna del Llanto o Columna de las Lagrimas.
22 июн 2024