Yo creo que ha sido etiquetada como una película pretensiosa por tanta adulación personal que el mismo González Iñarritú se auto realiza incluso al grado de gritarlo abiertamente en uno de los diálogos de la azotea del California Dancing, sin duda alguna es una cinta plagada de diversos y hábiles recursos cinematográficos, llena de esos espejitos brillantes y muy bien sincronizados aderezados con un excelente soundtrack que te llega a "empalagar" el ojo pero te endulza el oído puesto que es como si el mismo González Iñarritú te estuviera gritando un sueño raro en plena cruda después de una tremenda borrachera, definitivamente no es para todo mundo esta película, tampoco creo que es la mejor de este director sin embargo creo que si es la culminación de una posible evolución que despegó con Birdman en donde comienza a tantear el terreno mental y onírico de su alter ego.